El Anillo Verde Metropolitano de València sigue avanzando con la construcción de nuevos tramos. Concretamente, desde la Conselleria de Política Territorial, Obras Públicas y Movilidad se trabaja en el que discurre por la zona oeste, entre Aldaia y Massarrojos, invirtiendo un total de 5,2 millones de euros.
En concreto, la Generalitat Valenciana ha destinado algo más de 2,1 millones de euros para el tramo cuatro (Aldaia-Quart de Poblet), que cuenta con una longitud de 5,3 kilómetros y está próximo a su finalización; y 3,1 millones de euros para el tramo cinco (Quart de Poblet-Massarrojos), que tiene una longitud de 10,9 kilómetros y discurre junto al cauce del río Turia.
30 kilómetros ya operativos
Se trata de una infraestructura que está destinada “a mejorar la movilidad de peatones y ciclistas”, tal y como ha explicado la consellera de Política Territorial, Obras Públicas y Movilidad, Rebeca Torró.
Cuando el Anillo Verde esté finalizado contará con 56 kilómetros que vertebrarán toda la comarca de l’Horta, lo que supondrá una inversión de alrededor de 20 millones de euros. Actualmente, 30 kilómetros de esta infraestructura ya están operativos y el 95% restante ya está proyectado.
Las obras de estos dos tramos del Anillo Verde Metropolitano están financiadas por la Unión Europea, a través de los fondos NextGenerationEU, y se enmarcan en los objetivos del Consell para potenciar la movilidad sostenible y permitir reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en la línea de la Estrategia Territorial de la Comunitat Valenciana y del Plan de Acción Territorial de Ordenación y Dinamización de la Huerta de València.
Tramo: 4 Aldaia-Quart de Poblet
Este tramo se inicia en el entronque con el itinerario, ya en servicio, de Picanya-Alaquàs (tramo 3). En concreto, el punto inicial se encuentra en la glorieta que une las carreteras CV-409 y CV-403, dirigiéndose hacia Aldaia, cuyo casco urbano es bordeado por el exterior del parque ‘Cinturó Verd’ para dirigirse hacia Quart de Poblet, a su paso por el camino de la Colada de Pont Nou. La autovía A-3 se salva a través de una de las pasarelas existentes que da acceso al casco urbano de esta localidad.
El itinerario del Anillo Verde atraviesa esta población y pasa junto a la biblioteca municipal, discurre por sus calles aprovechando las aceras y, en algunos casos, el carril bici existente, desde la calle Tribunal de las Aguas de Quart de Poblet hasta el IES Riu Túria y bordea por el norte al instituto a través de una vía de circulación exclusiva para bicicletas y peatones. En este vial, que amplía su anchura anterior, se ha proyectado un mirador para disfrutar de amplias vistas al valle del Turia cuyas obras se encuentran muy avanzadas.
A lo largo del trazado del tramo cuatro se contemplan dos áreas de parada y descanso. Una, junto al cementerio de Quart de Poblet, con bancos y arbolado y otra, en el mirador del río Turia, con pérgolas y bancos.
El corredor proyectado finaliza en el cauce del río Turia, tras cruzar la Acequia de Mislata, punto en el que entronca con el tramo 5 del Anillo Verde.
Tramo 5: Quart de Poblet-Massarrojos
El itinerario proyectado en el tramo 5 se inicia en Quart de Poblet, junto al cauce del río Turia, y recorre además Paterna, Godella, bordea Rocafort y finaliza en Massarrojos, en concreto, en el Barranco del Palmaret, donde entroncará con el tramo norte del Anillo Verde, ya en servicio.
Este itinerario conforma un corredor seguro y accesible para ciclistas y peatones entre los diferentes núcleos urbanos atravesados, y se facilita el acceso a los espacios naturales del Parque Fluvial del Turia y de l’Horta Nord de València, así como otros ámbitos de valor patrimonial como la Real Acequia de Moncada, les Coves del Batà y les Coves de La Torre.
El proyecto contempla la realización de estructuras para cruzar el río Turia, con la duplicación de la actual pasarela de madera para salvar la Real Acequia de Moncada.
Asimismo, se han proyectado dos conjuntos mirador-área de descanso, ambos ubicados junto a la Real Acequia de Moncada. El primero de ellos, en el entorno del Molí de Batà en Paterna que proporcionará una amplia visión del valle del Turia y el segundo, en Godella, que permitirá disfrutar del paisaje de la huerta valenciana.