La Diputació de València, a través de la Delegación de Memoria Democrática, continúa acercando la historia reciente y el patrimonio documental a todos los municipios de la provincia con el programa “La Memoria en las Bibliotecas”, una iniciativa que se consolida como una de las principales herramientas de difusión cultural y educativa en materia de memoria democrática.
El proyecto, que nació hace una década con el objetivo de hacer llegar a todas las bibliotecas municipales obras fundamentales sobre la memoria histórica, ha distribuido hasta la fecha más de 12.000 ejemplares correspondientes a un centenar de títulos, alcanzando a más de tres millones de habitantes en toda la provincia. Según explica la vicepresidenta primera y Diputada de Memoria Democrática, Natàlia Enguix, “queremos que el patrimonio documental y la memoria democrática lleguen a todas las personas, independientemente del tamaño del municipio. Las bibliotecas son espacios de acceso libre al conocimiento y a la historia compartida, y con este programa buscamos que cualquier ciudadano o ciudadana pueda descubrir, a través de los libros, una parte esencial de nuestro pasado colectivo”.
En la edición de 2025, el programa ha seleccionado nueve nuevos títulos y ha enviado un total de 1.215 ejemplares a un total de 135 bibliotecas adheridas, entre las que se incorporan por primera vez las bibliotecas de Alfafar, Puçol y Sagunt.
Entre los títulos que forman parte de la nueva entrega destacan obras de gran valor histórico y literario como ‘3 años de antaño. Diari d’una mestra republicana valenciana’, ‘Clara Victoria. La crónica del debate que cambió la historia de las mujeres’, ‘Españolas en los campos nazis’ o ‘María la Jabalina’. También se incluyen publicaciones impulsadas por la propia Diputación, como ‘Punto Ciego y Memoria Democrática’, así como ejemplares donados por entidades colaboradoras, entre ellos ‘Arte y Propaganda. Carteles de la Universitat de València’, cedido por la propia universidad.
Enguix subraya además que “la memoria democrática no se construye solo con actos institucionales, sino también con la lectura, la educación y la cultura. Programas como este permiten que la memoria se mantenga viva en cada biblioteca, en cada pueblo, en cada persona que se acerca a un libro y reconoce en él una historia que también le pertenece, especialmente, remarcaba “en un contexto internacional complicado en el que crece la polarización política y los discursos que cuestionan los consensos básicos sobre derechos humanos y memoria histórica”.
La Memoria en las Bibliotecas forma parte de la línea de trabajo de la Delegación de Memoria Democrática, que ha consolidado un presupuesto total de dos millones de euros con los que desarrolla también proyectos de recuperación de espacios de memoria, los premios ‘Memòria a l’escola’, el premio literario ‘Maria La Jabalina’, así como ayudas a ayuntamientos y ayudas directas para la localización, exhumación e identificación de personas represaliadas en fosas comunes. En este sentido, Enguix insiste que “el presupuesto en materia de memoria democrática demuestra la voluntad de la institución provincial de mantener una política pública estable, rigurosa y sensible con esta cuestión fundamental para el futuro de nuestra sociedad”.