La Abogacía de la Generalitat investigará el abandono de puestos de los funcionarios involucrados en el proceso de asignación de plazas de docentes

El conseller José Antonio Rovira culpa al Botànic del caos por “no haber actualizado ni testado” el programa informático

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Daniel MacEvoy, José Antonio Rovira y Sonia Sancho
Daniel MacEvoy, José Antonio Rovira y Sonia Sancho

El conseller de Educación, José Antonio Rovira, acompañado por el secretario autonómico de Educación, Daniel MacEvoy, y la directora general de Personal Docente, Sonia Sancho, ha comparecido ante los medios de comunicación este miércoles para informar de los problemas del proceso de asignación de docentes.

En su comparecencia, Rovira ha afirmado que los errores informáticos producidos son resultado de un programa obsoleto que “no ha sido testado ni actualizado” para llevar a cabo un proceso que este año ha sido extraordinario al incorporar la estabilización de plantillas y el traspaso de técnicos de FP a Secundaria.

Asimismo, ha denunciado el “abandono” de algunos puestos clave, como el caso de los tres directores territoriales, cesados “a petición propia” por el Botànic justo cuando se iniciaba este procedimiento de adjudicación de vacantes. Concretamente, los ceses que dejó preparados la anterior consellera, Raquel Tamarit, fueron de cargos como la subdirectora general personal docente de plantillas, los directores territoriales y los jefes de servicio de las tres provincias.

En este sentido, ha incidido en que desde Educación se llevará este hecho a la Abogacía de la Generalitat por si requiere tomar medidas legales. “No es justo ni adecuado que personas responsables hayan primado sus intereses personales, políticos o vacacionales y se hayan ido a su casa dejando el proceso empantanado”, ha denunciado Rovira.

Al respecto, el responsable de la cartera de Educación ha reconocido el esfuerzo de las personas que han salvado el proceso: funcionarios, cargos nombrados por el anterior Gobierno y la cooperación de los sindicatos.

Sea como sea, el conseller ha defendido que el proceso está "bastante estabilizado" y ha descartado que pueda haber un alto volumen de reclamaciones, que actualmente ha cifrado en unas 400, similar a las de otros años.

Programa informático obsoleto

Los errores del programa informático por ser obsoleto es la principal causa del retraso en la adjudicación de las plazas. Según Rovira, se trata de un programa creado “en 1999 y que no se ha actualizado en 23 años”, y que, además, no estaba preparado para el plan de estabilización de interinos, listado que llegó el 1 de agosto.

"En 2020 la DGTIC les advirtió mediante un informe que el programa estaba obsoleto, no hicieron caso y nos hemos encontrado con este marrón", ha resaltado, insistiendo en no entender los motivos: “el anterior Gobierno se hubiera encontrado el mismo marrón… o no eran conscientes o no pensaban que ganarían”.

Finalmente, respecto a la afirmación del exsecretario autonómico de Educación, Miquel Soler, de que el cese de unos 200 docentes haya tenido que ver con los errores, Rovira ha remarcado que "no tenían nada que ver con este proceso": “Eran profesores que debían dar clase y que hacían funciones que no son competencia de ellos, por lo que deben estar en los institutos, no aquí… igual eran enchufados”, ha matizado irónicamente.

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