Existe una apuesta clara y reiterada por el Corredor Mediterráneo tanto por parte del gobierno autonómico, como de la sociedad civil valenciana, de esto no tenemos dudas, hoy más que nunca se visibilizado esta reivindicación fuera de nuestras fronteras regionales.
Es necesario un corredor ferroviario como lo entiende Europa, esto es con ancho europeo y alta velocidad, nada de apaños de “tercer hilo”, porque está claro que tenemos que ser competitivos en Europa, lo reclama y lo necesita nuestra industria, nuestros empresarios y la ciudadanía valenciana.
La finalidad del Corredor no es otra, que conectar por AVE las comunidades litorales entre si y a su vez con Europa a través de la frontera con Francia.
Ahora, de seguir así el ritmo de inversiones que lleva el gobierno central, las obras, que ya sabemos que ni este año ni el próximo se terminarán, mucho tememos que la nueva fecha marcada por el Ministerio de Fomento de finalización en 2019, pueda distanciarse en el tiempo “sine die”, porque el Nudo de La Encina, ahí sigue enredado, porque la solución del tercer hilo, no nos vale, y además ahora el Ministerio de Fomento rescindirá y volverá a licitar los contratos de obra de construcción de dos tramos del Corredor Mediterráneo al surgir "problemas irresolubles", eso sí, manifestando el compromiso del Ministerio con el Corredor Mediterráneo…
Pero es que lo que queremos desde la Comunidad Valenciana es inversión y hechos desde el gobierno de Madrid, y no más “apuestas verbales por el Corredor, ni buenas palabras”.
Si tenemos claro que el Corredor Mediterráneo es una infraestructura necesaria y clave, no solo para nuestra Comunidad, sino también para todo el arco mediterráneo peninsular, ya que en una sociedad como la actual para ser competitivos se necesitan los instrumentos logísticos adecuados, de modo que una red viaria de alta velocidad, así como un doble eje ferroviario con ancho internacional y que pueda ser utilizado por mercancías y pasajeros, con la debida conexión con puertos y aeropuertos, es fundamental para el crecimiento de nuestra economía.
Si sabemos que el Corredor conectará entre sí las principales ciudades del sureste peninsular, uniendo 11 provincias de distintas CCAA y cinco de las 10 mayores áreas metropolitanas, o lo que es lo mismo el 20 % de la superficie nacional y más del 47 % de la población española. Conectará a la España mediterránea con el centro de Europa en tiempo record.
Si conocemos que las cuatro comunidades autónomas integradas en el Corredor generan hoy el 45 % del PIB español, el 48,9 % de las exportaciones españolas, y suponen el 50 % del tráfico terrestre de mercancías de nuestra península.
Si existe un amplio consenso en toda la sociedad a favor de la necesidad del Corredor, porque entendemos que es positivo para nuestra tierra, ¿Por qué tenemos la sensación de que no es una prioridad para el gobierno central?