Las Fallas de València no solo son sinónimo de monumentales y coloridas construcciones artísticas, sino también de la explosión de alegría y diversión que aportan los tradicionales petardos. Estos elementos pirotécnicos, parte esencial de la celebración, vienen en una amplia variedad de formas y efectos, desde los típicos chinos hasta las novedades más llamativas, como el "perro cagón". ¿Cuales son los mejores?
Chinos
Los petardos chinos son los clásicos de las Fallas, conocidos por su sonido medio y su efecto explosivo. Son los preferidos por muchos debido a su accesibilidad y bajo coste.
Masclets
Los masclets son los petardos más vendidos en cuanto a los adultos. Con un sonido más fuerte, son los petardos que se suelen utilizar en la despertà de muchas comisiones falleras que no gastan el típico ‘tro de bac’.
Bombetas
Las bombetas son pequeños petardos de impacto aptos para niños y niñas, ya que estallan sin necesidad de prenderlos, únicamente lanzándolos a una superficie dura. Son, sin duda, los preferidos para los más pequeños de la casa y son ideales para iniciarse en el mundo de los petardos.
Salidas
También conocidos como “canyetes”, por la caña que llevan en la parte inferior, los petardos de salida son los que “despegan” con un sonido estridente tras encender la mecha, finalizando con un trueno.
Abejas
Conocidas por su forma y sonido característicos, las abejas son petardos que emiten un zumbido al volar por el aire antes de explotar. Son una opción popular entre los jóvenes debido a su efecto único y entretenido.
Borrachos
Los “borrachos” son petardos de gran envergadura, utilizados habitualmente en fiestas como los correfocs. Estos petardos salen disparados sin un rumbo fijo, por lo que se deben manipular con precaución.
Perro cagón
Es una de las novedades que más furor ha causado en las últimas fallas. Tras la edición del pasado año, estas Fallas 2024 el "perro cagón" es uno de los petardos más vendidos. Este peculiar petardo simula la acción de un perro defecando al ser encendido, dejando tras de sí cenizas que imitan el aspecto de heces. Este año se comercializan otros petardos similares, como la “gallina turuleca”, que pone un huevo, o el dragón que tira mocos. Su efecto cómico y sorprendente los han convertido en un éxito entre los niños y niñas.
Este año también está triunfando el "bebe cagón", otra de las versiones al tradicional perro cagón.
La variedad de petardos disponibles durante las Fallas de València ofrece una experiencia única y emocionante para todos los participantes, desde los más pequeños hasta los más grandes.