Valencia acogerá este sábado, 18 de noviembre, la manifestación para reivindicar un financiamiento justo para la Comunidad Valenciana. Una cita que se espera multitudinaria, y a la que no faltarán diferentes entidades ciudadanas, así como la gran mayoría de partidos políticos, a excepción del Partido Popular. Y para hablar de todos los detalles acerca del 18N, así como de las consecuencias que supone la infrafinanciación sostenida para los valencianos, València Extra ha hablado con Àgueda Micó, coportavoz de Compromís.
¿Qué representa la manifestación del 18N?
La manifestación del 18N es la respuesta a una necesidad que tenemos de cohesionar el mensaje porque los valencianos y valencianas estamos sufriendo, desde hace mucho tiempo, una grave discriminación. Aportamos al Estado como si fuéramos una comunidad rica, cuando en realidad somos una comunidad pobre, que estamos, en inversiones, por debajo de la media.
Los valencianos y valencianas somos el 11% de la sociedad española y el 10% del PIB español. Sin embargo, las inversiones que hemos recibido son del 3,5%. Esta situación sostenida durante mucho tiempo provoca que tengamos una deuda histórica de más de veinte mil millones de euros, que están acumulados por esa falta de financiamiento justo. Entonces, tenemos un problema con el sistema de financiación, tenemos un problema con las inversiones, y tenemos un problema con la deuda histórica, así como con infraestructuras como el Corredor del Mediterráneo, que no llega nunca y que es esencial para la economía valenciana.
Por tanto, hemos llegado a un punto en el que ya no podemos más, y toda la sociedad se ha unido. Los empresarios, los sindicatos, la sociedad civil, las Cámaras de Comercio, las universidades y los partidos políticos estarán el sábado detrás de la pancarta. Todos, excepto el Partido Popular.
Respecto a la ausencia del PP en la manifestación del 18N
Ahí sí que haría una llamada al Partido Popular para que salga a la calle en compañía nuestra. Esta manifestación no va en contra de nadie, al contrario. Va a favor de los valencianos y las valencianas porque hay determinadas cuestiones que necesitan la unidad y la acción de todos y todas, y es una lástima que ellos, que se van a Madrid o a Barcelona a manifestarse junto con sus compañeros del PP, no quieran salir a la calle en compañía del resto de la sociedad civil, de los partidos, de los empresarios y de los sindicatos a reclamar que no queremos ser ni más ni menos que nadie. Que queremos tener un trato justo, y tener una inversión acorde a los cinco millones de habitantes que somos los valencianos. Y es que al final, con la financiación, nos estamos jugando el pan de cada día de la gente.
En qué se podría invertir el dinero si tuviéramos una financiación justa
Ese dinero lo queremos para educación, para sanidad y para bienestar social, que son las políticas que tenemos las comunidades autónomas asignadas en la Constitución. La Generalitat Valenciana no llega a final de mes, es decir, para poder pagar lo que son las cuestiones básicas, necesitamos hipotecarnos, es decir, es como si una familia para poder pagar la luz, el agua y los alimentos de cada mes tuviera que pedir un préstamo. Al final, gastamos, cada año, más dinero para la deuda que tenemos que pagar por culpa de la infrafinanciación, que para hacer los colegios o para hacer hospitales. Y esto es lo que no puede ser porque nosotros estamos gestionando bien, no somos una administración corrupta y aprovechamos hasta el último céntimo para mejorar la vida de los valencianos y valencianas. Pero claro, no tenemos suficiente dinero para hacer todo lo que la sociedad valenciana necesita. Por tanto, es fundamental reivindicar que lo que queremos es un trato justo.
Sobre la deuda histórica
Nosotros somos el 11% de la población y, cada año, en vez de darnos el 11% de las inversiones, el Estado nos da el 3,5%. La diferencia es lo que ha generado que, cada año, se acumule la deuda porque la financiación que recibimos es como si fuéramos dos millones de personas, en vez de cinco millones que es lo que somos. Esto provoca que para poder desarrollar actuaciones básicas nos tengamos que endeudar. Pero, claro, esta deuda está generada por el financiamiento injusto que hemos recibido a lo largo de todos estos años.
Es muy injusto que no podamos llegar a final de mes, cuando los valencianos y las valencianas no han hecho nada malo. Lo que no puede ser es que en otras comunidades autónomas puedan hacer mamografías a partir de los 35 años, o puedan tener iPads para todos los niños en las escuelas, y nosotros no. Eso no tiene ningún sentido. Por tanto, solo queremos que nos den el dinero que nos corresponde en función de la población que somos. Este año, las inversiones por cada valenciano era de 119 euros, mientras que en otras comunidades, como Castilla y León, tenían 420 euros por habitante. Con la manifestación, queremos visibilizar el problema para que Montoro y Mariano Rajoy den una solución a la situación tan injusta que estamos viviendo.
Por último, ¿Por qué se ha sostenido tanto tiempo esta infrafinanciación por parte del Gobierno Central?
Creo que se ha sostenido esta infrafinanciación porque nunca hemos tenido una voz valenciana propia en el Congreso de Diputados y en el Senado. Creo que los diputados valencianos del Partido Popular y del Partido Socialista, tradicionalmente, cuando han ido a Madrid han hecho lo que les han dicho, y nunca se ha visibilizado esta problemática valenciana, nunca hemos tenido fuerza política en Madrid. Yo creo que Compromís, en este sentido, como proyecto político hace una labor fundamental para visualizar los problemas de los valencianos en Madrid. Y yo, ahí, tengo que nombrar a Baldoví, que se ha convertido en el portavoz de todos los valencianos y valencianas en Madrid.