El Instituto Valenciano de Cultura estrena 'Los cuatro jinetes de la apocalipsis', de Vicente Blasco Ibáñez

Guardar

El Instituto Valenciano de Cultura presenta del 12 al 28 de mayo la adaptación teatral de 'Los cuatro jinetes de la apocalipsis', una de las obras más conocidas del novelista Vicente Blasco Ibáñez. Dirigida por Inma Sancho, está interpretada por Empar Canet, Vanessa Cano, Enric Juezas, Borja López Collado, María Maroto, Carles Sanjaime, Bruno Tamarit y Guillo Zavala. La escenografía es de Carlos Montesinos, la iluminación de Victor Antón y el vestuario de Pasqual Peris.

El director general del Instituto Valenciano de Cultura ha destacado que «es voluntad de las producciones del Teatro del Pueblo Valenciano acercar el público valenciano a los grandes textos de la literatura universal y hacerlo en su lengua; en esta línea, la efeméride del 150 aniversario del nacimiento de Blasco Ibáñez nos permite releer su literatura en el contexto social y cultural contemporáneo.''

El espectáculo que propone el Instituto Valenciano de Cultura se concreta en la adaptación teatral de la novela, concluida en 1916, cuando el escritor vivía en un París asediado por la gran guerra europea. Consciente del momento histórico, Blasco se alinea como entusiasta partidario de los aliados, que son postulados como el bando que merece la victoria. El escritor apasionado acaba convirtiéndose en activista francòfil. Por eso escribe una historia de amor y de conflicto familiar en un contexto destructivo y trágico, la Primera Guerra Mundial.

Para Juli Disla, autor de la versión valenciana: ''nos enfrentamos al reto de poner en escena la obra de Vicente Blasco Ibáñez con todo el respeto que impone uno de los autores más importantes de nuestra literatura, y queremos hacerlo con el único propósito de acercarlo al público de la manera más honesta y fiel en relación a la novela original''.

Esta no es la primera vez que esta novela se adapta a otros formatos artísticos. Además de las conocidas versiones cinematográficas, la compañía de Enrique Rambal ya hizo una adaptación teatral que se estrenó al teatro Principal de Valencia en octubre de 1923, con un texto de Luís Linares Becerra. Obviamente, la propuesta que presentamos al 2017 es muy diferente.

La directora del espectáculo, Inma Sancho, ha insistido en el hecho que: ''la dificultad (o la apuesta) de hacer una adaptación teatral de una novela se encuentra, básicamente, al tomar decisiones, y deseamos que estas decisiones sean las más acertadas para explicar la historia y trasladar el material necesario porque, al fin y al cabo, estemos contando el mismo». «Adaptar es, sobre todo, saber elegir; elegir los personajes, los lugares donde pasan las escenas, la información, las tramas y los detalles. Es justamente en el acto de elegir donde surge todo aquello que se tiene que descartar», ha continuado. «Y es aquí cuando aparece la pena para tener que sacrificar tantíssim material que en la lectura original nos han parecido maravilloso, pero que las necesidades escénicas hacen imposible'', ha lamentado.

Con la producción de 'Los cuatro jinetes de la Apocalipsis', el Instituto Valenciano de Cultura quiere hacer accesible el contexto histórico que Blasco Ibáñez nos narra de manera casi periodística en algunos pasajes y que la carencia de conocimientos que pueda tener el espectador sobre la Primera Guerra Mundial no le impida seguir y engancharse a la historia. Los motivos que desencadenaron el conflicto, la situación política previa y los acontecimientos que iban sucediéndose en los meses en que transcurre la acción pueden suponer una dificultad para entender el comportamiento de los personajes y el viaje que realizan.

La novela de Blasco Ibáñez retrata una sociedad en un momento de cambio, de trasbals. Y será la guerra cruel la que aboco los personajes a hacer aparecer los instintos, comportamientos y valores que sólo se entienden si se lee con emoción y humor.

Cómo influye un contexto hostil (bélico) en las personas, los efectos y la necesidad de adaptarse a los tiempos que están viviendo, la incertidumbre de un futuro desconocido, el abaratamiento de los planes burgueses, poner en cuestión las ideas políticas, religiosas, patrióticas incluso el amor a la familia. «Todo esto es el que hemos encontrado a la novela y es el que queremos traer al escenario», ha concluido Sancho.

Destacados