Se podría decir que fueron pioneras. Mujeres con un enorme poder que cambiaron el rumbo de nuestra historia. Mujeres influyentes que consiguieron importantes alianzas y, en ocasiones, actuaron de mecenas allanando el camino al trono de sus esposos. En definitiva, reinas valencianas, muy conocidas en su época, que quedaron en el olvido eclipsadas por el androcentrismo de la historia. Sin embargo, ahora, su vida y, por qué no, sus hazañas vuelven a ver la luz gracias a ‘Les Nostres Reines’, un proyecto impulsado por la Generalitat Valenciana para visibilizar el valor de todas estas mujeres.
Germana de Foix
Se rescatan del olvido figuras como Violante de Hungría, mujer de Jaume I que ejerció de consejera al más alto nivel político; María de Castilla, más conocida como la ‘reina gobernanta; o Germana de Foix. Ellas fueron algunas de las monarcas medievales del Reino de València que quedaron relegadas a “hijas de” o “esposas de”. Con esta propuesta cultural, no solo se intenta recuperar a las reinas valencianas, sino dar a conocer de qué manera sus decisiones políticas cambiaron el rumbo de sus reinos. “Son nuestras reinas medievales, las más lejanas, de las que menos sabemos”.
Y es que pese a que las mujeres quedaron excluidas de la línea de sucesión real – todas ellas fueron reinas por matrimonio -, no impidió que tuvieran un papel determinante en el futuro del pueblo valenciano. Fueron altas consejeras y, desde mitad del siglo XIV, también asumieron importantes tareas de gobierno que repercutieron directamente en nuestra historia.
Este fue el caso de Violante de Hungría, cuyo consejo fue clave para la conquista de València; o el de Elionor de Sicilia, la primera reina que ejerció competencias gobernativas como lugarteniente del rey en su ausencia, y a la que le siguieron otras reinas como María de Castilla o María de Luna, que tuvo un papel clave en los inicios de la guerra civil catalana. Reinas decididas, mujeres fuertes que tomaron decisiones contundentes para salvaguardar su reino, y que no pueden quedar en el olvido.
Isabel la Católica
Sin duda, Isabel de Castilla, más conocida como Isabel la Católica, es una de las figuras más reconocidas por sus políticas de fortalecimiento del poder real, pero, sobre todo, por ser, junto con Fernando el Católico, los impulsores de la Inquisición o de las Capitulaciones de la Santa Fe, que fueron el origen de la llegada de Cristóbal Colón a las islas del Caribe. Sin embargo, han habido otras reinas que también han dejado un importante huella en la historia valenciana, como Germana de Foix que no solo se convirtió en la primera virreina moderna del Reino de València, sino que fundó el monasterio de San Miguel de los Reyes, donde todavía se conservan sus restos mortales.
Y es, precisamente, la esencia de estas reinas medievales valencianas lo que nos lleva a hacer un viaje por el pasado y el presente para descubrir algunas de las mujeres relevantes de nuestra ciudad como Guillermina Medrano, la primera concejala del Ayuntamiento de València, en 1936, durante la República o, por ejemplo, Isabel de Villena (1430-1490), considerada la primera escritora conocida en lengua valenciana con claros ideales feministas y en contra de las obras misóginas de la época.
De hecho, su obra ‘Vita Christie’, escrita con el propósito de ilustrar a las monjas de su convento, está enmarcada en el protofeminismo español del siglo XV. Y es que pese a estar escrita con el objetivo de fomentar la devoción religiosa, narrando la vida de Jesucristo, aprovecha para hacer una defensa de las mujeres con argumentos difíciles de refutar.
Carmen Alborch, abanderada del feminismo español, que denunció la ausencia de las mujeres en los espacios de poder, es otra de las figuras que han dejado su impronta en la historia valenciana. “El feminismo ha mejorado la calidad de vida de todos los ciudadanos y, por ello, debería ser declarado Patrimonio Inmaterial de la Humanidad”. La esencia de estas palabras acompañaron siempre a Carmen Alborch. Consellera de Educación y Cultura, ministra de Cultura en el mandado de Felipe González, directora del IVAM o escritora de obras como ‘Solas, Malas o Libres’, Carmen Alborch, en todas sus facetas, ha llevado la lucha por la Igualdad en su ADN.
Carmen Alborch (a la izquierda)
Finalmente, tampoco pueden quedar en el olvido mujeres que, en la actualidad, sigue abanderando el cambio. Este es el caso de Mavi Mestre, primera mujer en ocupar el cargo de Rectora en la Universitat de València, rompiendo una tendencia de más de 500 años; o Pilar Mateo, una de las científicas valencianas más relevantes, que se encuentra entre las 10 científicas más prestigiosas de España y entre las 100 primeras a nivel mundial. Su carrera se ha centrado, principalmente, en el desarrollo de nuevas tecnologías para erradicar enfermedades mortales que se difunden a causa de la pobreza. Así, entre sus principales logros, destaca el haber elaborado una pintura que permite matar a los pequeños insectos que transmiten enfermedades como la malaria o el dengue.
¿Fueron las reinas medievales las que empezaron a abrir el camino? Puede ser. Estas mujeres, pese a estar en la cima del poder, tuvieron que luchar para acceder a él, para trascender al ámbito político, aunque sin dejar atrás la principal tarea que la sociedad les asignaba: engendrar al sucesor. Mucho ha llovido desde entonces, y las grandes mujeres de la historia han abierto las puertas a otras muchas, han conseguido derechos y libertades, pero todavía queda mucho por hacer.
La igualdad real y efectiva sigue siendo una de las asignaturas pendientes del siglo XXI. Es responsabilidad de todas y todos trabajar para frenar las voces que intentan criminalizar el feminismo y negar la lacra de la violencia machista, pues el objetivo no es otro que seguir avanzando hacia una sociedad más justa, más igualitaria y más libre.