Ontinyent sigue dando pasos adelante para que dos de sus proyectos más importantes a nivel de infraestructuras se conviertan en realidad tras años de trabajo. Se trata del proyecto de regeneración y revitalización del barrio de La Vila y del proyecto de transformación de la zona de viviendas de la calle Cantereria en una zona verde inundable, que invertirán más de 4,6 millones de euros de fondos autonómicos.
Ambas propuestas cuentan con una dificultad elevada en cuanto a las autorizaciones necesarias para su ejecución. En este sentido, la pasada semana tenía lugar una reunión en València entre el alcalde de Ontinyent, Jorge Rodríguez, el director general de Calidad, Rehabilitación y Eficiencia Energética, Alberto Rubio, y la directora general de Cultura y Patrimonio, Carmen Amoraga que consiguió desbloquear esta situación.
En ambos casos habían surgido problemas técnicos, derivados de las modificaciones necesarias en el Plan General de Ordenación Urbana de Ontinyent, que requería de la autorización de la Dirección General de Patrimonio. En este encuentro, donde también estaban presentes el concejal de Territorio y diputado provincial Joan Sanchis y varios técnicos de ambas administraciones, se acercaban posturas para contar con los pertinentes informes favorables que permiten hacer las referidas modificaciones, que dan luz verde a la ejecución de los dos proyectos.
Una “deuda histórica” con Ontinyent
El director general de Calidad, Rehabilitación y Eficiencia Energética, Alberto Rubio afirma, en palabras a València Extra, que “estamos muy satisfechos por la receptividad de Patrimonio y por la manera en la que nos supimos coordinar, con mucha agilidad. Conseguimos encontrar soluciones a unas cuestiones que requerían de algo de coordinación”.
En este sentido, Rubio reconoce que el proyecto de Cantereria “es estratégico para nosotros” al ser “una de las pocas intervenciones que se están realizando de cara a la mejora de la resiliencia frente a inundaciones en la Comunitat Valenciana y esperamos que nos sirva de ejemplo para poder extrapolarlo a otros municipios”.
Por lo que respecta a las actuaciones en el barrio de La Vila, el director general reconoce que se trata de “una deuda histórica que tiene la Generalitat con Ontinyent y que se viene arrastrando durante mucho tiempo. Este proyecto tiene muchas dificultades por la magnitud y por haber de intervenir en un patrimonio protegido, entre otras cuestiones”.
Desde la Generalitat esperan que, en el caso de la Cantereria, el próximo año empiecen los primeros derribos de las viviendas y se pueda consolidar el talud, mientras que en La Vila se tardará algo más en actuar, ya que se requiere “una modificación bastante compleja del Plan General”.
4,6 millones de euros de la Generalitat
Por su parte, Jorge Rodríguez, alcalde de Ontinyent, resalta "la buena predisposición" de los representados autonómicos para “acercar posturas” y “hacer un nuevo paso en la consecución de dos proyectos esenciales para la ciudad, como es el que nos permitirá proteger y dar nueva vida al barrio de La Vila, y el que adaptará la Cantereria al contexto del cambio climático, evitando riesgos para las personas".
Hay que recordar que el proyecto de transformación de la zona de viviendas de la calle Cantereria en una zona verde inundable, supondrá una inversión de 3,2 millones de euros de los cuales 1,6 serán aportados también por la Generalitat Valenciana. De la cantidad restando una parte será aportada por los fondos europeos del programa EDUSI, que tienen unos plazos de ejecución que requieren que la actuación no se demore en el tiempo.
Por su parte, el proyecto de regeneración y revitalización del barrio de La Vila tiene una inversión prevista de 3 millones de euros de la Generalitat crear 12 viviendas, valorar la antigua muralla medieval y mejorar la accesibilidad a este barrio histórico.
Apuesta por la rehabilitación de inmuebles
En este sentido, el Ayuntamiento de Ontinyent sigue impulsando la recuperación de inmuebles en la ciudad gracias al programa pionero “Ontinyent rehabilita”, iniciado en 2013 y que desde este momento ha permitido otorgar más de 400 ayudas por importe de 2,5 millones de euros, provocando un impacto junto a las aportaciones de los propietarios superior a los 8 millones de euros.
Este programa tiene como objetivo incentivar las compras de inmuebles en zonas como el conjunto histórico de La Vila, del centro histórico Raval - Poble Nou y de la zona del Camí dels Carros - Cantereria.