La ciudad de Sueca ha recibido de manso de la familia de Camilo Albert las memorias inéditas escritas por su viuda, Matilde Graso, en el periodo de posguerra, las cuales, a partir de ahora, formarán parte del Archivo Histórico Municipal. Esa ha sido la voluntad expresada por sus familiares, los cuales han acudido en el Ayuntamiento para hacer entrega de estos manuscritos al alcalde, Dimas Vázquez, en representación del municipio, en un acto emotivo que ha tenido lugar en el despacho de alcaldía.
Camilo Albert, nacido a Sueca en 1896, fue conocido "por la actitud inconformista que siempre mantuvo ante las clases sociales más poderosas, que pronto le hicieron objeto de persecución", tal como se relata en el libro Personajes históricos suecans. Diccionario Biográfico, de Joan Antoni Carrasquer. Albert ejerció, además, las funciones de regidor al Ayuntamiento de Sueca en 1936. Las memorias fueron escritas por su mujer, Matilde Graso, años después de que fuera fusilado a Gandia, el 7 de agosto de 1939.
"Hoy hemos celebrado este acto para mostrar nuestro orgullo de dar en el pueblo de Sueca las memorias de Matilde Graso, escritas entre 1939 y 1968, que quedarán por siempre jamás en el recuerdo y que servirán, al mismo tiempo, como homenaje a estas personas que dieron la vida y sufrieron tanto por la libertad. Estamos muy contentos de poder hacer entrega al alcalde, en representación de la ciudad, de estas memorias inéditas", ha señalado la neta mayor de Camilo Albert y Matilde Graso, Graciela Candela Albert, quien ha aprovechado el momento para solicitar una calle con el nombre de su abuelo, "así como los de Virtudes Cuevas o Amado Granell, porque se merecen que no se olvido quién fueron".
El alcalde de Sueca, Dimas Vázquez, ha afirmado que, para el Ayuntamiento, "es un honor que, con este acto, se concluya la entrega de estas memorias inéditas de un suecà que vivió una época muy convulsa, cómo tantas otras personas, la única arma del cual fue la palabra. Nosotros, como Ayuntamiento, tenemos la satisfacción de recibir hoy este material que contribuirá a enriquecer el Archivo Histórico Municipal y, además, servirá porque no olvidamos nuestra historia a fin de que no se repitan episodios cómo este".
En los mismos términos se ha expresado el regidor de Cultura, Vladimir Micó, quien ha mostrado su satisfacción por esta donación "en una caja muy especial, por haber sido elaborada por la misma Matilde Graso. Para una familia tiene que ser complicado renunciar a ese material que supone tanto de sentimiento; pero también comprendo que hayan querido dejarlo por siempre jamás en el Archivo de Sueca, el cual verá aumentado su valor patrimonial e histórico".
Las memorias de Matilde Graso dadas por su familia, forman parte también de la exposición inaugurada recientemente a Sueca, con el título Silencio. Memoria histórica suecana, que podrá visitarse hasta el 24 de abril en el Espacio Moret de la sala Los Porxets.