El alcalde de Cullera, Jordi Mayor, y la concejala de Turismo y Promoción Económica, Débora Marí, tras la reunión mantenida con representantes del sector turístico de la localidad, han decidido establecer una serie de medidas preventivas ante la pandemia del coronavirus, ya que, hasta ahora, no existe ningún caso de contagio por Covid-19 en Cullera.
Entre las medidas se encuentra el cierre de las playas, así como suspender los servicios turísticos que se prestan en las playas, como el de salvamento y socorrismo. Así, se ha optado por izar la bandera roja y prohibir el baño con el objetivo de evitar aglomeraciones de gente en los arenales de la localidad.
Asimismo, desde el consistorio de Cullera se ha establecido ampliar, del 1 de mayo al 1 de julio, el periodo de pago voluntario de la tasa de la basura, así como el de la tasa de sillas, mesas y toldos. Finalmente, reiteran la petición de quedarse en casa en la medida de lo posible.