Carcaixent paraliza las iniciativas para crear "macroinstalaciones" fotovoltaicas

En una sessió extraordinària celebrada ahir es va acordar la suspensió de l'atorgament i admissió a tràmit de llicències

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El Pleno del Ayuntamiento de Carcaixent mostró su desacuerdo prácticamente unánime a albergar en el término municipal grandes instalaciones fotovoltaicas que puedan suponer una alteración importante del territorio. En una sesión extraordinaria celebrada ayer, se acordó la suspensión del otorgamiento y admisión a trámite de las licencias que se puedan solicitar para la implantación de instalaciones de energía fotovoltaica y/o eólica con el fin de estudiar la reforma de la ordenación urbanística de los dichos usos en el vigente PGOU. El punto fue aprobado por los votos a favor de todos los grupos municipales y la abstención del concejal no adscrito, Juan Albert.Para el Gobierno Municipal la opción del desarrollo de la energía solar fotovoltaica representa una decidida apuesta por el respecto al Medio Ambiente, puesto que potencia una fuente de energía renovable y no contaminante, como lo demuestran iniciativas ya llevadas a cabo como la adhesión del municipio en el Plan «Municipios en Red», impulsado por la Conselleria de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica para la implantación de plantas solares fotovoltaicas a través de la creación de Comunidades Energéticas Locales Municipales.Sin embargo, como ya se ha evidenciado en otras zonas, la proliferación de macroinstalaciones puede afectar de forma muy marcada a los valores paisajísticos del territorio. Así, como se puso de manifiesto durante el pleno, su implantación se tiene que realizar en aquellos lugares en los cuales estas actividades e instalaciones sean sostenibles y coherentes con el resto de políticas territoriales y medioambientales. Desde el Gobierno Municipal se ha manifestado la voluntad de estudiar el entorno y aprobar una regulación que facilite la implantación de las energías renovables, de aquella forma que resulte más armónica con el territorio y compatible con los intereses generales de la población, puesto que sería contraproducente que se instalaron grandes plantas que pudieran afectar áreas cultivadas, próximas en los cascos urbanos de la población o urbanizaciones, alterando la calidad de vida de las personas o que pudieran tener un impacto negativo para afectar espacios de valor ambiental, territorial o paisajístico.Paco Salom, alcalde de Carcaixent ha explicado que la urgencia del pleno venía dada porque había que buscar una solución inmediata ante la posibilidad que alguna empresa privada presentara un proyecto. «Nadie puede dudar que estamos a favor de las energías limpias, pero no a cualquier precio, no nos podemos permitir acoger mastodónticas instalaciones en nuestro pueblo que supondrían un enorme impacto paisajístico y para el Medio Ambiente que podría afectar a las generaciones futuras».

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