Juan Ramón Adsuara: 'Al final todo lo que el Ayuntamiento ahorra, lo podrá revertir en los vecinos, y no irá directamente a los bancos'

’Em sent orgullós de les històries d’algunes famílies que t’agraeixen un xicotet impuls de l’Ajuntament, quan l’estaven passant malament'

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Juan Ramón Adsuara: 'Al final todo lo que el Ayuntamiento ahorra, lo podrá revertir en los vecinos, y no irá directamente a los bancos'

Alfafar ha evolucionado mucho en los últimos años. La apuesta del Consistorio por crear una zona comercial que ha fomentado el empleo, pero también la apuesta por dinamizar Alfafar con la organización de importantes acontecimientos, que ya se han convertido en todo un referente en la comarca, han conseguido que Alfafar se convierta en lo que hoy en día es, aunque Juan Ramón Adsuara, Alcalde del municipio, lo tiene claro: 'No es que Alfafar haya cambiado y se haya paralizado, sino que estamos en constante evolución, y pensando qué modelo de ciudad queremos para 2025'.

Hablamos con Juan Ramón Adsuara, y empezamos con un balance de cómo ha cambiado Alfafar en los últimos años.

Bien es verdad que en estos últimos 4-5 años, Alfafar ha cambiado mucho, y queremos que siga cambiando. El principal motor de cambio de Alfafar viene de esta zona comercial, que la tenemos desarrollada en un 75%, y cuando acabemos ese 25%, el punto fuerte tiene que ser que toda la economía que genere la zona comercial, podamos revertirla en la población. Por lo tanto, estamos en pleno cambio. No es que Alfafar haya cambiado y se haya paralizado, sino que estamos en constante evolución, y pensando qué modelo de ciudad queremos para 2025.

Una de las principales preocupaciones para los valencianos es el empleo, y vosotros habéis hecho una clara apuesta para reducir la desempleo con la organización de diferentes iniciativas, como el foro de empleo. ¿Cómo está siendo el resultado?

Desde que se ha abierto el centro comercial, más la recuperación económica, unas 1.300 – 1.400 personas han encontrado empleo en el ámbito local, pero los datos también muestran que, en el ámbito comarcal, se ha notado la dinamización de la economía. Ayuntamientos como Massanassa, Benetússer o Sedaví también tienen gente joven que ha encontrado empleo, y no solamente gente joven. Por ejemplo, en esta zona comercial, hay una empresa alemana que no tuvo ningún criterio en el momento de la selección, y ha entrado gente de 50, 55 o 60 años, y cuando los ves trabajando es un orgullo. A partir de aquí, tenemos que seguir trabajando en la formación especializada. De hecho, hemos llegado a un acuerdo con el Servef para hacer unas aulas con formación específica para que encuentren puestos de trabajo en esta zona comercial.

Cerrasteis 2017 con un superávit de más de un millón de euros, ¿Cómo se consigue esta cifra?

Una parte, son partidas que, por lo que sea, no da tiempo a ejecutar, otra parte es el control de servicios, y otra es la racionalización. Aquí el problema es que cierras el año con superávit, pero el Ministerio te obliga a amortizar deuda, y esto, de alguna forma, fastidia mucho a los Ayuntamientos. Nosotros, a pesar de ser el ex-ministro de nuestro partido, no hemos apoyado nunca esta norma porque, ahora, son inversiones financieramente sostenibles, pero nosotros optábamos porque, en vez de que la amortización de esa deuda fuera para los bancos, se revertiera para políticas sociales. En 2013 -2014, cuando también teníamos un superávit parecido, había muchas familias que necesitaban ayudas para el comedor o necesitaban alimentos, y a nosotros nos fastidiaba mucho que ese superávit fuera para los bancos, que habíamos rescatado nosotros, y no para las familias que realmente lo necesitaban. Pienso que esta medida era para reducir el déficit de cara a Europa, pero no de cara a las personas, y esto, en las elecciones de 2015, lo pagamos.

¿Crees que se mantendrá esta Ley de Racionalización y Sostenibilidad a la cual hacías referencia?

Pienso que no. Creo que, poco a poco, se irá abriendo y todo el superávit, todo lo que el Ayuntamiento ahorra, lo podrá revertir en los vecinos, y no irá directamente a los bancos que, encima, los bancos, a final de año, te dicen que tienen beneficios. Me parece una falta de respeto, como Alcalde, que tú hagas los deberes, ahorres, tengas que amortizar deuda bancaria, cuando está controlado, y te dejas a personas o familias sin las oportunidades o la igualdad que perseguimos.

Habéis apostado por visibilizar social y culturalmente a Alfafar con la organización de diferentes acontecimientos, como la Feria de la Salud o la Feria del Libro. ¿Habéis notado una mejor acogida por parte de los vecinos?

Es una dinamización. Lo que queremos es que todos los meses, o cada quince días, la gente tenga algo que hacer. Ahora, en verano, solemos hacer el teatro en la calle o cine de verano por las plazas. También organizamos diferentes ferias, como es la del libro, que ya apostamos en 2012 por ella, y se ha convertido en un referente comarcal en la que participan librerías de toda la comarca y de Valencia, y donde hemos creado una cuna de 12-14 escritores locales, que publican todo el año. Al final se trata de que Alfafar esté vivo, la gente salga a la calle y esto también crea dinamismo y riqueza para todos los comercios.

Como no, tenemos que hablar de las fiestas de Alfafar. ¿Qué tienen de especial?

Lo que las hace especiales es la participación de la gente. Desde la 15 K nocturna que organizamos desde hace ocho años, que ha cogido mucha fama dentro del mundo del running, hasta la plaza que tenemos, que favorece mucho la convivencia. Ponemos nuestros barracones, todas las pandillas tienen su lugar en la plaza y las asociaciones de Alfafar también participan activamente. La plaza es el centro neurálgico y, además, también tenemos las fiestas del barrio Orba y las del barrio de El Tremolar. Por lo tanto, hay mucha oferta para todas las edades, y para todas las familias, en las fiestas de Alfafar.

¿Cómo se consigue que tres fiestas en un mismo pueblo tengan tanta participación?

Sobre todo, pensando en todos. Las fiestas no son sólo una gran actuación por la noche, sino que empiezan a las cinco de la tarde. A esa hora ya puede haber un teatro, un cine, actividades para los más pequeños, pero también para los más mayores. Las fiestas no son sólo por la noche y para la gente joven, sino que son durante todo el día y para todas las edades, y esto hace que la plaza siempre esté llena. Además, hacemos Semana de Fiestas y Semana Deportiva en la cual todos interactúan.

Uno de los actos más destacados es la 'Festa de la Font', ¿En que consiste?

La 'Festa de la Font' es muy tradicional. Hará ahora alrededor de 105 años que se iluminaron las aguas potables de Alfafar. El monumento al agua, declarado como Bien de Relevancia Local, está en medio de la plaza, y lo que representa es que baja hasta el pozo donde se iluminaron las aguas potables, trayendo la riqueza y la modernización a Alfafar. De este modo, se celebra la 'Festa de la Font' como homenaje a ese grupo de personas que pusieron dinero de su bolsillo, fueron a Madrid, consiguieron el permiso para sacar el pozo de las aguas potables y, a partir de aquí mejoraron Alfafar.

Pasamos, ahora, a preguntas algo más personales. ¿Cómo es Juan Ramón Adsuara como Alcalde?

Para mis concejales, muy pesado jajaja. Soy muy pesado, muy insistente y siempre detrás de los técnicos, de los concejales... No presionándolos, pero sí dándoles ese impulso para sacar las cosas. En la Administración Pública, no te puedes quedar con los brazos cruzados. La Administración funciona, pero, si quieres que funcione mejor, tienes que estar muy encima tanto en la calle, como dentro del Ayuntamiento para que los servicios sean mucho más ágiles y dinámicos, y esto se transforma en una rápida respuesta al vecino.

¿Te ha cambiado mucho la vida?

Sigo siendo el mismo. Lo único es que me cuesta media hora ir de casa al Ayuntamiento, cuando vivo al lado jajaja, pero esto también se agradece. Pero sigo haciendo lo mismo. Yo si iba a comprar a Consum, sigo yendo a Consum, si iba a la piscina, sigo yendo a la piscina... Creo que sigo siendo la misma persona, y el día que no sea la misma persona, espero que haya alguien cerca de mí que me diga: '¡Ey! Alto'.

Haciendo balance, ¿De qué te sientas más orgulloso y qué queda por hacer?

Me siento orgulloso de las historias de algunas familias que vienen, te cuentan y agradecen un pequeño impulso del Ayuntamiento, cuando lo estaban pasando mal, que ha sido clave para que, ahora, en la recuperación económica, hayan podido encontrar trabajo, sacar la familia adelante, los niños hayan podido seguir estudiando, hayan tenido los materiales escolares, la beca comedor... y, de alguna forma, han venido y te lo han agradecido de la manera más sencilla. Esto es el que más llena de la política, un 'Gracias'.

Y por otro lado, ver esta zona comercial, y toda la gente que viene aquí a trabajar porque detrás de cada persona, hay una historia personal, como el estudiante que no podía pagarse los estudios y gracias a un trabajo aquí puede pagarse la matrícula. Al final, no es sólo una zona comercial, sino que tiene una parte social. Lo que nos ha movido a estar tres años en burocracia para impulsar esta zona comercial ha sido el fondo social que tiene en el fomento del empleo.

Y, ¿Qué me gustaría que cambiara? La falta de infraestructuras que todavía tenemos, pero que esperamos que diseñando un modelo de ciudad de futuro, como puede ser el modelo Alfafar 2025, y con la base sólida que es esta zona comercial, podamos tener la capacidad de financiación para conseguir esos objetivos.

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