Así ha quedado la Alqueria del Pi de Alfafar tras su rehabilitación

La actuación ha supuesto una inversión de 1,5 millones de euros

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La Alqueria del Pi de Alfafar
La Alqueria del Pi de Alfafar

El Ayuntamiento de Alfafar ha rehabilitado la tradicional Alqueria del Pi con una actuación que ha supuesto una inversión de 1,5 millones de euros, de los que 400.000 € han sido subvencionados por la Unión Europea. Durante la visita que el concejal de Comunicación, Eduard Grao, ha realizado a los medios de comunicación, se han podido visitar las distintas estancias de este edificio del siglo XVII, situado en pleno núcleo histórico de la localidad.

Las obras han supuesto la rehabilitación del conjunto arquitectónico manteniendo su esencia a través del uso y recuperación de materiales históricos y tradicionales, así como nuevos elementos ecocompatibles. De hecho, “se ha apostado por recuperar y rehabilitar antes que derribar con el objetivo de conservar la esencia de esta casa señorial que ha sido declarada Bien de Relevancia Local”.

L'Alqueria del Pi fue construida entre los siglos XVII y XVIII y es ejemplo de la tradicional tipología arquitectónica agrícola de la época, casa-patio-cambra. Formada por un edificio principal más antiguo y otros tres anexionados de distintas épocas, la alquería aún conserva muchos elementos arquitectónicos originales. Es la única construcción de tradición agrícola de estas características que todavía pervive en el casco urbano de una localidad de l'Horta Sud, y que pronto abrirá sus puertas al público.

La Alqueria del Pi Alfafar
La Alqueria del Pi Alfafar

Por el momento, ya se está realizando visitas escolares para descubrir la historia y tradición de este edificio. No obstante, no será hasta el mes de septiembre cuando se prevé su apertura al público. L’Alqueria del Pi no solo acogerá la Oficina de Turismo, que ya ultima los trámites administrativos para su puesta en marcha, sino también un Centro de Interpretación del Arroz con herramientas originales, que han sido donadas por familias, y un vídeo explicativo, con testimonios en primera persona, que dan a conocer cómo se cultivaba el arroz de manera tradicional.

El resto de estancias se destinarán a usos culturales, expositivos, así como para desarrollar acciones de las distintas asociaciones de la localidad. Asimismo, se prevé utilizar un espacio para la puesta en marcha de un sistema de alquiler de bicicletas, ya que desde la Alquería del Pi partirán dos rutas. Una hasta el Tremolar/Cavalló y otra hasta Turbines, en pleno corazón de la Albufera.

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