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Tenía claro que no solo era necesario abordar políticas públicas de igualdad y de mujer y que ellas tenían que estar en primera línea política, sino que, además, los hombres tenían que cambiar su forma de proyectarse políticamente. Por eso, cuando entró a formar parte del equipo de gobierno de Foios, Àlex Micó hizo de la Concejalía de Igualdad y Mujer un espacio transversal que actuara en todas las áreas del ayuntamiento para dar respuesta al vecindario y avanzar el consistorio al mismo nivel que su pueblo.
¿Cuáles fueron tus primeros retos cuando entraste en el área de Igualdad y Mujer?
Este ha sido el gobierno más igualitario que ha tenido Foios por la influencia de Concejalía de Igualdad. Básicamente porque pensábamos que el Ayuntamiento es 100% política y la gestión se queda en la puerta, pero cuando la política se convierte en gestión al 100%, cuestiones como la igualdad se quedan en la puerta porque molestan, incomodan. Nosotros nos hemos encargado de introducir la igualdad como un eje transversal de todas las áreas y que todo el mundo entienda que tiene que haber una visión feminista para hacer cualquier gestión o proyecto, que tenemos que tener muy presente el punto de vista de género.Respecto a igualdad, el primer objetivo era casi revolucionario, que era hacer un Plan de Igualdad, porque es muy fuerte que un ayuntamiento no lo tenga en 2015. A pesar de todas las limitaciones, no podíamos dejar a un lado este proyecto cuatro años más, era fundamental. El problema es que no teníamos suficientes recursos económicos, materiales y técnicos para llevarlos adelante solo y el que hicimos fue unirnos a la Mancomunitat del Carraixet, donde proyectamos el Plan de Igualdad con otros pueblos y orientar las políticas públicas relacionadas con la igualdad y la mujer a hablar de determinadas cuestiones para que no se vean como incómodas sino como necesarias. Hemos hablado de todas las cosas incómodas que no se ven en la televisión pero que son necesarias, como la violencia machista, los CIE, hemos conseguido que un vecino senegalés de Foios saliera de un CIE, estamos dentro del circuito vecinal de pueblos refugio, hemos hablado de La Pastora, de la transexualidad, etc. Además, hemos hecho más protocolos de atención con Servicios Sociales, Policía Local y al Centro de Salud para reforzar la actuación contra la violencia machista, así como actuaciones muy concretas para dar indicaciones a la Policía para que no se tolere ninguna expresión de odio y este pueblo sea más antirracista, más feminista y más antifascista y, en definitiva, más seguro y amable con todos y todas.
El estado de ánimo no se cuantifica pero el hecho de dar un color nuevo al pueblo hace que la gente que no entre en la norma no se vaya de aquí, como ha pasado, sino que vuelva y que lo haga con ojos nuevos, sin poner en cuestionamiento a las personas que viven dentro de la normatividad, porque no es ningún antagonismo. Incrementamos, y va por el tercer año, el programa Nagore para trabajar los roles de género, las nuevas masculinidades, la identificación del acoso en Secundaria con todas las limitaciones de recursos que tenemos. La cuestión final de todo se concreta en las placas simbólicas que se han colocado en la fachada del Ayuntamiento para incluir a todos y todas, sean como sean, porque si ningún día no estamos nosotros otro gobierno pueda sentirse incómodo por retirar estas placas o por no prestar atención en las personas a las que representa. Nos hemos dado cuenta que hemos puesto al Ayuntamiento a la altura del pueblo, porque el pueblo estaba mucho más sensibilizado en estas cosas que el consistorio.
“Se pueden hacer muchísimas cosas por la igualdad con pocos recursos”
Por tanto, ¿ha sido un trabajo conjunto con el resto de concejalías?
Sí. Incluso, se ha notado el aprendizaje en directo desde el lenguaje. Ahora cuando hacemos un Pleno decimos “buenas tardes a todos y todas” cuando antes era “a todos”. Siempre hemos utilizado un lenguaje inclusivo, nos sentimos más incómodos cuando solo estamos reunidos hombres y pensamos que hay que cambiarlo porque no está bien… Y esto tiene una influencia cultural intangible pero que sin duda es favorable en la igualdad. Ya estaba en el ambiente pero en Foios lo hemos hecho nosotros. La lucha ha hecho que el sentido de la gente de Foios sea más igualitario que hace 4 años. Y no solo en cuanto al género, sino también en cuanto al racismo o al colectivo LGTBI.¿Piensas que la gente es consciente que hay mujeres que sufren una doble o triple discriminación por su género, su orientación sexual y su origen?
Yo creo que sí que lo hemos conseguido porque no hemos hecho solamente las políticas públicas para hablar del género ni de la raza u otras discriminaciones exclusivamente. Lo hemos hecho conjuntamente y cada una ha tenido su espacio en cada acto o reivindicación. Hemos organizado las actividades de forma que ha quedado claro que la misma mujer puede ser la protagonista de todas las reivindicaciones y puede sufrir una doble o triple discriminación.¿Qué recursos tiene esta concejalía?
En Igualdad empezamos con 4.000 euros, después con 6.000 y ahora tenemos unos 10.000, que son muy pocos, pero con ellos hemos podido hacer grandes cosas. Los recursos continúan siendo muy insuficientes en comparación con otras áreas y es fundamental aumentarlos. Esto viene también por una carencia de recursos humanos, porque llegamos y nos encontramos con la falta de una persona que se encargue de igualdad y es difícil hacer un presupuesto que planifique un trabajo en esta materia. Los presupuestos de la primera legislatura son los más importantes porque marcan el resto y, como no teníamos esta figura, empezamos con desventaja y hemos ido aumentando las partidas despacio, pero son insuficientes. En el caso de Mujer, hemos hecho actuaciones en concreto que se concentran principalmente en torno al Día de la Mujer.
A pesar de esto y que sois un pueblo pequeño se han hecho grandes cosas, ¿no?
Correcto. Aquí tengo un gran dilema porque nuestra reivindicación es que las partidas presupuestarias de Igualdad sean grandísimas, pero mientras conquistamos ese espacio y los recursos lleguen a una cuantificación justa, tenemos que apañarnos con lo que hay y se pueden trabajar muchísimas cosas con lo que tenemos. No se pueden lograr, por ejemplo, un Centro Mujer 24 horas comarcal o local sin recursos ni se pueden abrir plazas de trabajo pero queremos que todo lo que hemos hecho perdure en el tiempo y venga quién venga no lo quite. Por ejemplo, el Plan de Igualdad es una declaración de intenciones porque no llega a formar exclusivamente a la Policía Local en este sentido o no hay una oficina de atención a las víctimas de maltrato machista, pero lo fundamental es que haya voluntad política. Si no hay, la cosa se queda en la gestión, que se queda fuera. La ventaja que teníamos es que partíamos de cero porque no se había hecho nada antes, entonces se pueden hacer cosas sin recursos, como campañas de sensibilización visuales… Y es curioso porque otros pueblos más grandes que Foios nos han llamado para saber cuál es nuestra partida presupuestaria de Igualdad para hacer tantas cosas. Es una cosa que me hace llenarme de orgullo.Ha aumentado la participación ciudadana en las actividades?
Sí, ya lo creo. Al principio, la política progresista tiende a ser un poco dogmática con la gente y piensa que el pueblo es más conservador de lo que es, pero cuando vess que la gente responde, te das cuenta que estaba esperando estas actividades. Nos gustaría mucho que vinieran muchos más hombres porque vienen principalmente mujeres, pero ha aumentado exponencialmente la participación.“Ha quedado claro que una misma mujer puede ser protagonista de todas las reivindicaciones”
¿Qué acción ha sido clave para ti?
Respecto a Igualdad, el haber trabajado el empoderamiento de la mujer hasta el punto que ellas tengan claro que la culpa de lo que pasa no es de ellas, como se concreta en algunas acciones del Plan de Igualdad, y que entiendan que tienen a su Ayuntamiento para salir en su defensa. Por ejemplo, la semana pasada salió una sentencia de un hombre de Foios condenado a 12 años de prisión porque violó a la cuidadora de su mujer impedida y que antes de violarla le amenazó porque era una persona migrada y él era español, pero esta persona lo denunció. Cuando una institución le da la seguridad y la confianza a una persona de que si denuncia va a tener respuesta y acogida, cuando mejoras el protocolo de actuación, cuando consigues que el pueblo responda a una situación así, una mujer migrante que se supone que está en la tercera discriminación tiene la valentía suficiente para denunciar. Esto muestra que Foios es mucho más seguro.Y por otro lado, haber trabajado la campaña de señalar los hombres que se paran a la altura de una joven a decirle cualquier cosa o justificar que a una mujer le asedian por la ropa que tenga, haberlo puesto en unas pantallas en el pueblo para decir que son machistas. Para nosotros es súper importante porque hemos trabajado decirle a un machista lo que es y desculpabilizar a la mujer. También hay una cuestión muy simbólica que es que en vez de hacer minutos de silencio, nosotros aplaudimos para que la mujer que esté sufriendo maltrato sienta ese ruido y sepa que estamos con ella y que el maltratador sepa que estamos contra él. No vamos a bajar la cabeza como señal de sumisión, vamos a hacer ruido para decir que estamos hartos y que no aguantamos más casos así.
En cuanto a Mujer, un grupo de mujeres vino a pedirme que el 8 de marzo hiciésemos una marcha por el pueblo. El año pasado nos atrevimos a hacerla pensando que solo vendrían 10 o 15 personas, las que nos pidieron hacerlo, y nos encontramos una marcha multitudinaria con mujeres, hombres y familias enteras, por eso este año la repetiremos. Por supuesto, va encabezada por mujeres y el concejal está pero detrás de ellas y acaba con la lectura de un manifiesto para entender que se celebra el Día de la Mujer pero donde se reivindica todo lo que queda por conseguir. Este año, después de la marcha proyectaremos un video de homenaje que hemos hecho a todas las mujeres del pueblo para mostrar y agradecer todo l0 que han conseguido.
¿Por qué continúan produciéndose casos como el de esta violación?
Yo creo que estamos en un momento muy delicado. Es muy difícil continuar hablando de que la justicia tiene que tener más recursos y que se tiene que formar a los jueces y las juezas sin caer en la mano dura y en el terrorismo machista. Me parece que es una equivocación ese concepto. Hay que poner en valor el trabajo de las administraciones que, atendiendo a los colectivos feministas y a las mujeres supervivientes, hacen unos protocolos de actuación que mejoran la actitud de la Administración y la de la ciudadanía frente a estos casos y que hacen que el maltratador se sienta señalado y que la mujer no tenga miedo a denunciar. No sé muy bien cómo conseguir que la gente entienda que es de emergencia social, no quiero caer en la cuestión reaccionaría, sino que pienso que lo más importante es actuar antes de que las maten. Pero la gente también tiene ansia de que paguen. Tenemos que tener mucha cautela porque si legislas desde la visceralidad del dolor puedes caer en la barbarie del asesinato y un Estado de derecho tiene que huir totalmente de esto proyectando protocolos de actuación para que la gente no piense que denunciar es un acto de heroicidad, sino que tuvo ese apoyo y acogida que necesita por parte de la Administración, que los pueblos rechazan de verdad la violencia machista, acabar con fake news como las de Toni Cantó y dignificar las víctimas con nombres y apellidos porque se entienda que es de alarma, porque no solo pose en peligro a las mujeres, sino la identidad de los hombres como maltratadores.Como padre de una niña pequeña, ¿cómo piensas que se tiene que educar a las nuevas generaciones?
Suena retórico, pero pienso que hay que educarlas para que sean valientes si quieren serlo. Quiero que a los chicos se los enseñe a no ser violadores y no caer al pensar cómo pueden vestirse las chicas, por ejemplo. Me gustaría educar mujeres libres desde la corresponsabilidad del trabajo en casa para que vean normal que su madre baile con ella y que su padre también, que su padre le prepare la cena y la duche, que llore igual que su madre… Que no haya diferencias. Suena muy bonito pero pienso que con el ejemplo cotidiano en casa se pueden compensar los factores externos que no podemos controlar. El más importante es enseñar a mi hija que será valiente si ella quiere.“Cuando ves que el pueblo responde, te das cuenta de que había estado esperando”