El sindicato de trabajadores de la Enseñanza de UGT, integrado en la Federación de Empleados y Empleadas de los Servicios Públicos (FeSP-UGT PV) considera una "norma de mínimos, aunque insuficiente y que llega tarde", la norma publicada este viernes en el DOGV por la que la Conselleria de Educación establece un periodo transitorio de cuatro años para obtener las titulaciones necesarias, según ha informado el sindicato en un comunicado.
Según UGT, estas medidas son "llegan tarde" porque "el profesorado afectado por el requisito lingüístico no ha podido trabajar durante el curso 2017-2018, ni tampoco participar en las adjudicaciones de julio de 2018 --previstas para iniciar el curso 2018-2019--, las más numerosas con más de 13.000 vacantes". "Y es a partir de ahora, cuando el número de vacantes y sustituciones se reduce, cuando podrán participar en estos procesos de adjudicación de plazas, limitando también su derecho a las plazas que se encuentran en las localidades de predominio lingüístico castellano". Además, esa limitación es mayor en las especialidades de Formación Profesional (FP), añade.
Asimismo, UGT ha subrayado que "permitir trabajar en las localidades y comarcas de predominio lingüístico castellano tiene cierto recorrido y es de posible aplicación en aquellos cuerpos docentes como el de maestros --ya que normalmente suelen existir colegios en casi todas las localidades de la Comunitat-- e incluso del profesorado de Secundaria, pero para el profesorado de FP, será difícil que existan plazas, ya que el número de centros con ciclos de FP es mucho menor y está muy diversificado".
Desde el sindicato, proponen dos medidas más "para solucionar este conflicto laboral". La primera responde a la "ampliación de uno o dos cursos más la moratoria", y la segunda defiende "que se exima de este requisito lingüístico al profesorado mayor de 45 años y con 10 años de servicios".