El secretario autonómico de Turisme, Francesc Colomer, ha confesado este viernes que le han "dolido sobremanera" algunas de las declaraciones que se han hecho sobre el sector turístico durante el estado de alarma establecido para frenar la Covid-19 y ha querido marcar prioridades: "Mi primera lealtad es con el sector turístico, la segunda con el Gobierno". No obstante, cree que "no hay discrepancias" sino que "pude haber matices".
Así lo ha manifestado en la Comisión de Industria y Comercio, Turismo y Nuevas Tecnologías de Les Corts, al ser interpelado por la oposición sobre algunos anuncios "contradictorios" del Gobierno o declaraciones como las del ministro de Consumo, Alberto Garzón, que afirmó que el turismo es un "sector de bajo valor añadido, estacional y precario", o las de la vicepresidenta del Consell, Mónica Oltra, cuando señaló que el modelo turístico de masas "reporta muchos beneficios a unos pocos pero arrastra fenómenos como las 'kellys' a las que maltrata tanto salarialmente como en condiciones de trabajo".
Colomer ha advertido que "disociar el turismo del valor añadido es vivir en el pasado, fuera de nuestra realidad y un error de percepción". En su opinión, este tipo de declaraciones obedecen a una "visión reduccionista". "Claro que puede haber contradicciones e injusticias como en otros sectores. Nada que no se pueda resolver con diálogo social y la ley en la mano", ha remarcado.
En su opinión, este tipo de declaraciones son un "error" que "no ayuda en nada y más cuando el sector está en la lona, noqueado" por la pandemia de la Covid-19 aunque ha defendido el derecho que ampara la libertad de expresión para realizar estas críticas.
En todo caso, el secretario autonómico de Turismo de la Comunitat Valenciana ha insistido en que e parecer "muy duro" el hecho de "ligar el turismo a la pobreza".
En la misma línea se ha dirigido a la Dirección General de Costas, que a su juicio "debería ser más sensible" a las peticiones de ampliación de los 'chiringuitos' de playa, "con un morador que forma parte del paisaje".
Según Colomer, "si en este momento, con los parámetros de sostenibilidad y de distancia social para evitar contagios nos se tiene un punto de compresión con la situación coyuntural para hacer posible que los establecimientos no mueran, nos estaríamos equivocando", ha alertado.