La ciudad de Valencia ha dado un paso decisivo en el fortalecimiento de su infraestructura sanitaria y en la mejora de la atención oncológica con la aprobación de dos actuaciones de gran impacto: por un lado, la ampliación del Instituto Valenciano de Oncología (IVO), uno de los centros de referencia en España en el tratamiento del cáncer; y por otro, la construcción del futuro Centro de Protonterapia en el Hospital Universitario La Fe.
La pasada semana, la Comisión de Urbanismo del Ayuntamiento de Valencia aprobó iniciar el procedimiento de consulta a administraciones públicas y a personas interesadas en la propuesta de modificación puntual del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) que permitirá la ampliación del IVO. Además, se acordó someter dicha modificación a información pública durante un periodo de 45 días, con el objetivo de garantizar la participación ciudadana en un proyecto que busca aunar el interés sanitario con la mejora urbanística del entorno.
La propuesta, promovida por la Fundación Instituto Valenciano de Oncología, pretende calificar como dotacional sanitario/asistencial una parte del actual Parque Professor Llombart, ubicado en la confluencia de las calles Professor Beltrán Báguena, Joaquim Ballester, Ricardo Micó y Gregori Gea. En esa zona se prevé levantar una nueva ampliación del hospital sobre una superficie de 1.743,30 metros cuadrados, en la que se construirán dos nuevos bloques hospitalarios: uno de cinco alturas y otro de doce, con una edificabilidad total de 16.000 metros cuadrados de techo.
Un modelo asistencial concentrado y eficiente
El concejal de Urbanismo, Viviendas y Licencias, Juan Giner, explicó, en un comunicado de prensa, que esta modificación del PGOU responde a “un claro interés social sanitario”, ya que permitirá agrupar todo el equipamiento asistencial del IVO en una única localización. Esto, según Giner, “mejorará de manera notable la asistencia, el cuidado y el seguimiento de los pacientes oncológicos, al facilitar la coordinación de recursos, la eficiencia en la atención médica y la accesibilidad a los tratamientos”.
Además del beneficio sanitario, el proyecto incluye una reordenación del entorno urbano. La reducción de superficie del parque afectado será compensada con la creación de nuevas zonas verdes en distintos puntos del barrio de Tendetes, aumentando incluso la superficie total de espacios ajardinados. Las nuevas áreas verdes se situarán entre las calles Doctor Machí, Reus y Periodista Llorente, colindantes al edificio de Bombas Gens, así como en parcelas situadas en la intersección de la calle Professor Beltrán Báguena con la avenida Menéndez Pidal, y en la zona conformada por las calles Francesc Tàrrega, Tramuntana y Enginyer la Cierva.
Este rediseño urbano no solo permitirá el crecimiento del IVO, sino que también hará posible la futura ampliación del CEIP Doctor Olóriz, contribuyendo así a dotar al barrio de mejores servicios educativos, zonas de esparcimiento y equipamientos públicos. “Es un proyecto integral que pone en el centro el bienestar de los vecinos y la calidad de la atención sanitaria”, añadió Giner.
El Instituto Valenciano de Oncología es considerado un referente nacional en el diagnóstico, tratamiento e investigación del cáncer. Fundado en 1976, el centro atiende cada año a miles de pacientes de toda España y destaca por su modelo de gestión sin ánimo de lucro, centrado en el paciente y la calidad asistencial. Por ello, desde el consistorio se considera fundamental facilitar su expansión para dar respuesta a la creciente demanda de servicios oncológicos en la Comunitat Valenciana.
La protonterapia en La Fe, una revolución tecnológica contra el cáncer
Junto a la ampliación del IVO, Valencia avanza en la incorporación de tecnología puntera con la construcción del nuevo Centro de Protonterapia en el Hospital Universitario La Fe. Se trata de una técnica de radioterapia de altísima precisión, especialmente indicada para pacientes oncológicos pediátricos y para tumores localizados en zonas de difícil acceso, como el cerebro, médula espinal, ojos, cabeza y cuello o pulmón.
Este centro albergará uno de los diez equipos de protonterapia donados por la Fundación Amancio Ortega al Ministerio de Sanidad, dentro de un programa nacional para la implantación de esta tecnología en el Sistema Nacional de Salud. La inversión total asciende a 29 millones de euros para el equipo tecnológico, mientras que la Generalitat Valenciana ha adjudicado la construcción del edificio por 21,5 millones de euros.
Las obras ya están en marcha en una parcela junto al hospital y el edificio estará conectado subterráneamente con el Servicio de Oncología Radioterápica. Para albergar el equipo será necesario construir un búnker de hormigón armado con muros de hasta 2,5 metros de grosor, capaz de contener las radiaciones ionizantes y el calor generado por el proceso de producción de protones.
Además, el centro contará con un diseño centrado en el bienestar del paciente: un gran patio verde central, espacios diáfanos y acogedores, zonas de espera con privacidad y áreas comunes pensadas para generar un entorno calmado y seguro, tanto para pacientes como para el personal sanitario.
La previsión es que las obras y la instalación del equipo concluyan a finales de mayo de 2027. Tras un periodo de calibración de dos meses, se espera que el primer paciente pueda ser tratado con esta tecnología en julio o agosto de ese mismo año.
La protonterapia supone un importante avance clínico, ya que reduce de forma significativa la irradiación a los tejidos sanos circundantes al tumor, disminuye los efectos adversos a largo plazo y reduce el riesgo de desarrollar nuevos tumores inducidos por la radiación. Esto es especialmente relevante en niños y adolescentes, quienes presentan mayor sensibilidad a los tratamientos convencionales.
Con estas dos actuaciones – la ampliación del IVO y la puesta en marcha de la protonterapia – Valencia se consolida como una ciudad comprometida con la innovación médica y con la mejora continua de la atención a pacientes con cáncer. Una apuesta por la salud pública, la investigación y el bienestar social que coloca a la Comunitat Valenciana en la vanguardia de la lucha contra el cáncer en España.