València da un paso firme en su política de bienestar animal con la ampliación del proyecto de instalación de casetas comedero para colonias felinas, una medida que combina salud pública, sostenibilidad y sensibilidad social. La ciudad cuenta ya con más de 600 colonias felinas registradas y más de 1.000 voluntarios que, día a día, cuidan y alimentan a los gatos callejeros de forma responsable.
Segunda fase: los grandes parques de València se suman al proyecto
Tras una exitosa primera fase en las pedanías —con 50 casetas instaladas en zonas como Borbotó, Carpesa, Benimàmet, Pinedo y El Forn d’Alcedo—, el Ayuntamiento ha lanzado la segunda fase, llevando estas estructuras a algunos de los principales parques urbanos de València.
Ahora, las casetas comedero para gatos están presentes en:
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Parque Central (con tres colonias felinas)
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Parque de Marxalenes
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Jardines de Viveros
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Parque del Oeste
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Jardín de Ayora
Estas instalaciones sustituyen los antiguos puntos improvisados de alimentación, ofreciendo un entorno más higiénico, seguro y estético, perfectamente integrado con el paisaje urbano.
Casetas comedero: alimentación segura, higiene y respeto animal
Cada caseta comedero está diseñada para ofrecer alimento y refugio a los gatos sin hogar, protegiéndolos del clima y evitando que accedan otros animales no deseados. Además, se facilita la labor de los voluntarios que gestionan las colonias gracias a una estructura más accesible y limpia.
Este modelo de alimentación controlada cumple con los nuevos criterios de la ley de bienestar animal, mejora la higiene urbana y reduce la presencia de plagas derivadas de comida mal gestionada en espacios públicos.
Gestión ética: más de 600 colonias felinas bajo control
Según la Oficina Municipal de Bienestar Animal, actualmente hay más de 600 colonias felinas en València, todas incluidas en programas de seguimiento, esterilización y control poblacional mediante el método CES (Captura, Esterilización y Suelta).
Este enfoque ético y sostenible permite que los gatos sigan su vida en libertad sin generar desequilibrios ecológicos ni molestias a los vecinos.
Voluntariado y formación, pilares clave del proyecto
Más de 1.000 voluntarios acreditados participan en la gestión diaria de las colonias. Estas personas reciben formación periódica sobre legislación, cuidados básicos, protocolos de esterilización y buenas prácticas. Gracias a su labor desinteresada, se garantiza una convivencia armónica entre los felinos y el entorno urbano.
Con la entrada en vigor de la nueva ley estatal de protección animal, se refuerzan los requisitos de actuación, y València se ha adaptado ofreciendo formación continua a los cuidadores acreditados.
Coordinación institucional: parques y bienestar animal unidos
El proyecto se desarrolla con la coordinación entre el área de Parques y Jardines y el organismo autónomo de Bienestar Animal, lo que ha permitido reorganizar los puntos de alimentación, eligiendo ubicaciones discretas y accesibles, compatibles con el uso ciudadano de los espacios verdes.
Además, se creará una mesa de gestión de colonias felinas, donde participarán juntas municipales, técnicos veterinarios y expertos en fauna urbana, con el objetivo de unificar criterios técnicos y adaptar el proyecto a las necesidades de cada zona.
Un compromiso con la ciudad del futuro
El concejal de Bienestar Animal, Juan Carlos Caballero, ha destacado que este proyecto busca no solo proteger a los animales, sino también mejorar la calidad de vida urbana. Las casetas comedero para gatos callejeros en Valencia representan un modelo de convivencia y respeto que puede servir como ejemplo para otras ciudades.
València demuestra así que una ciudad moderna no solo cuida sus infraestructuras, sino también a los seres vivos que la habitan. Con políticas públicas basadas en el bienestar animal, la educación cívica y la sostenibilidad urbana, la capital del Turia avanza hacia un modelo más humano, limpio y equilibrado.