Valencia

"Tenemos que ser el ejemplo perfecto para que en València empiece a haber ese cambio de miras en el urbanismo"

Les associacions veïnals de Benimaclet es mostren en contra del PAI que pretén reactivar el PSPV

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La modificación del PAI de Benimaclet presentado por la vicealcaldesa de València, Sandra Gómez, suscitó multitud de críticas entre sus socios de gobierno y asociaciones del mismo barrio como la Asociación Vecinal de Benimaclet o Cuidem Benimaclet. Una corrección que fue criticada por Compromís al ser una decisión "no consensuada" y que ha generado que esta formación convocara la comisión de seguimiento del acuerdo del Rialto el pasado viernes. Por su parte, los vecinos critican la falta de diálogo con ellos, pues desde la AVV apuntan que su última reunión con Sandra Gómez data del mes de noviembre.

La iniciativa presentada por la responsable de Urbanismo del Ayuntamiento de València presentaba una gran cantidad de edificaciones, con hasta 1.000 viviendas y un 20% del espacio dedicado a sector terciario, además de un gran parque y algunos equipamientos, es decir, instalaciones públicas como un campo de fútbol o otros servicios. Sin embargo, esto choca frente a las demandas de los colectivos vecinales, que piden la "desclasificación del suelo" con el fin de poder proteger la huerta y el paisaje de la zona. "Necesitamos un urbanismo por y para la persona, tenemos que ser el ejemplo perfecto para que en la ciudad de València empiece a haber ese cambio de miras en el urbanismo", expresa Carlos Marco, miembro de la asociación Cuidem Benimaclet.

En la nota de la inadmisión del PAI (Proyecto de Adecuación Urbanística) de Metrovacesa, Sandra Gómez declaraba que no se modifican los parámetros urbanísticos definidos en el PGOU, pero "sí buscan dar respuesta a la mayor parte de las demandas vecinales". No obstante, desde estas asociaciones vecinales no entienden como la vicealcaldesa hace esas declaraciones cuando lo que están pidiendo los vecinos, "es todo lo contrario. No queremos cambiar el paisaje, no queremos cambiar la huerta, no queremos cambiar ese valor que tenemos, por esos equipamientos", afirmaba Arturo Sanz, de la Asociación Vecinal de Benimaclet.

"Vicent Sarrià (exconcejal de Urbanismo) nos presentó el proyecto de Metrovacesa supuestamente adaptado a nuestras demandas, pero nos dejó claro que no se podía tocar la edificabilidad porque le había dado su palabra a la empresa. Ahora hay algunos cambios, pero la sensación es la misma: la edificabilidad no se toca y no abrimos un proceso participativo donde esté el socio de Gobierno, Compromís, y donde se interpele a los vecinos y vecinas como se ha hecho en el Cabanyal", explicaba hace unos días el presidente de la AVV, Javier García.

La AVV defiende una "reducción sustancial de la edificabilidad", algo que consideran posible porque "no hay derechos adquiridos por los propietarios y no se han patrimonializado los mismos". Además, defienden "una conexión física real entre Huerta y Ciudad" con "el soterramiento parcial de la Ronda Nord entre los caminos de les Fonts y de Farinós". Desde Cuidem Benimaclet denuncian que "la revisión del PAI no puede maquillar superficialmente el planteamiento" y defienden que "hay que abordar parámetros estructurales y desclasificar el suelo", lo que "permite hacer dotaciones y salvar la huerta". Muestran su "oposición" a la propuesta del PSPV y valoran que "prevé la urbanización total del sector, con una redistribución" sin abordar "la problemática de raíz: la destrucción de una de las tierras más fértiles del mundo".

"Lo que sí que está claro es que el barrio de Benimaclet no quiere a al proyecto de Metrovacesa ni a Metrovacesa, claramente, porque no es ni sostenible, ni realista , ni está pensado por y para los vecinos del barrio", declara Carlos Marco. Sin embargo, la situación es compleja y se prevé difícil de revertir, aunque Marco se ha mostrado cauto con la posición de Compromís, que parece que sí que estaría más en la línea de lo que se demanda en el barrio y más dispuesto a dialogar.

Cabe recordar que el PAI se rige por los parámetros del Plan General de Ordenación Urbana, algo que lleva más de 30 años en vigencia y que es necesario retocar, según Marco, porque es la "única forma" de modificar realmente un PAI. Además, no entiende por qué "ahora estando los PAI paralizados, ellos (el PSPV) los han abierto sin ningún tipo de demanda por parte del barrio, pero tanto de Benimaclet como de cualquier otro".

La situación sobre este PAI de Benimaclet continúa todavía por esclarecerse. Compromís tratará de convencer al PSPV de cambiar la propuesta anunciada la semana pasada y dar voz a los vecinos. Unos vecinos que, han sido escuchados gracias a la unión de las dos asociaciones vecinales del barrio: AVV y Cuidem Benimaclet, quienes a pesar de esto, mantienen ciertas diferencias en otros aspectos. Esta unión "pretende ser un ejemplo para otros colectivos de que si nos unimos, tendremos más fuerza y seremos escuchados con mayor continuidad. Hace 20 años cuando podían hacer con los movimientos sociales todo lo que querían, ahora estamos mucho más preparados, tenemos más argumentos, y sabemos cuando nos dicen la verdad y cuando nos mienten", ha señalado Carlos Marco, miembro de Cuidem Benimaclet.