A falta de la firma oficial prevista hoy, el Partido Popular y Vox han alcanzado un acuerdo para formar gobierno en el Ayuntamiento de València. Casi cinco meses después de las elecciones, los representantes del partido liderado por Santiago Abascal en España entrarán en el gobierno de María José Catalá. Lo hará con Juan Manuel Badenas, actual portavoz de Vox, como segundo teniente de alcalde y con las áreas de Empleo, Parques y Jardines, la Albufera, Mayores y Fiestas sin Fallas. De los 33 representantes políticos del Ayuntamiento de València, 13 de ellos son del PP y 4 de Vox, por lo que el partido de Catalá necesita su para obtener mayoría absoluta y poder cerrar temas fiscales o los tan ansiados presupuestos municipales.
En las últimas horas se han intensificado las negociaciones en busca de la estabilidad política para el Ayuntamiento de València y, finalmente, Vox ha conseguido su propósito: entrar en el gobierno antes de la aprobación y confección de los presupuestos municipales. Además, otra clave para llegar al acuerdo ha sido la ‘no’ renovación del convenio con el Valencia CF hasta que no empiecen de nuevo las obras del Nou Mestalla, medida que venía reclamando Vox y que ha significado un acercamiento entre las posturas de ambos partidos.
Tal y como afirmó el portavoz de Vox, Juan Manuel Badenas, el interés de su partido se centraba en la elaboración de las cuentas municipales y sus 4 representantes eran y son vitales para llegar a la mayoría absoluta que se necesita para ello.
Reparto de poderes públicos entre PP y Vox
Las cuatro competencias que ostentará el partido liderado por Juan Manuel Badenas son: Empleo y Emprendimiento con la Fundación de Empleo València Activa pero sin Innovación; Fiestas y Tradiciones sin las Fallas que continuará siendo competencia del PP; Familia, Juventud e Infancia; Mayores; Sanidad y Mercados; y Parques y Jardines. Los concejales de Vox, Juan Manuel Badenas, Cecilia Herrero, José Gosálbez y Mónica Gil tendrán la gestión de una de estas áreas. Badenas continuará al frente del partido como segundo teniente de alcalde, pudiendo recaer la alcaldía en algún momento concreto ante la ausencia de Catalá.
Estas áreas anteriormente gestionadas temporalmente por el Partido Popular, dejan de lado a los ediles que las coordinaban, como son Paula Llobet en Empleo y Emprendimiento; Rocío Gil en Familia, Juventud e Infancia; Juan Carlos Caballero en Parques y Jardines, y Sanidad; Santiago Ballester en Fiestas y Mercados; y Marta Torrado en Mayores. El acuerdo con Vox deja fuera a estos y estas concejales, puesto que estas áreas pasan a ser coordinadas por los voxistas.
Tras el acuerdo ultimado el pasado martes con una reunión de más de dos horas con Ignacio Gil, José Marí y Cristóbal Grau y que será firmado en breves, María José Catalá abre una nueva perspectiva política, lejos al gobierno solitario que se planteaba desde el primer momento. Junto con la ciudad de València, PP y Vox alcanzan acuerdos en el Consell, Elche y Castelló, estableciendo un nuevo panorama político.
Los indicios del acuerdo
Los primeros indicios del acuerdo de gobierno llegaban el martes cuando el diputado nacional de Vox y presidente de la provincia de Valencia, Ignacio Gil Lázaro, formó parte de una reunión en el Ayuntamiento y, el día siguiente, calificó de “correctos” las ordenanzas fiscales anteriormente rechazada. Ante tal afirmación, Catalá tildó de “buena disposición” las palabras del representante de Vox.
Por otro lado, la alcaldesa asegura que ambos partidos trabajan progresivamente en favor de los ciudadanos y ciudadanas de valencia. “Poco a poco se afianzará una confianza política y nosotros no tenemos ningún problema. Es el mejor sistema para la ciudad y el partido de Vox ha mostrado su buena disposición a gobernar junto al Partido Popular y eso siempre es interesante”, asevera Catalá.
Juanma Badenas, portavoz de Vox, anunció que su partido y el de Catalá intensificarían las reuniones para seguir haciendo política en Valencia por cuestiones que “afectan al Ayuntamiento”. De hecho, la anterior semana, Vox estuvo recordando de forma intensa que su partido era necesario para poder gobernar con estabilidad, pues mientras no participaran con el Partido Popular no podrían llegar a tener la representación suficiente para aprobar los temas de importancia municipal, tal y como pasó con el nuevo organigrama para la dirección de la Empresa Municipal de Transportes (EMT).