El Ayuntamiento de València ha mostrado su sorpresa ante el cambio de postura de Vox respecto a la tramitación de la Zona de Bajas Emisiones (ZBE). Así lo ha manifestado el portavoz del gobierno municipal, Juan Carlos Caballero, quien ha calificado la decisión de su socio como un “volantazo” después de haber respaldado la ordenanza en hasta cinco ocasiones anteriores.
Caballero ha subrayado que, pese a esta discrepancia, la estabilidad del gobierno municipal no está en riesgo, y ha recordado que el Partido Popular mantiene su compromiso de servir a los ciudadanos y apostar por el diálogo para sacar adelante los proyectos de la ciudad.
“Nos comunicaron su negativa para sacar adelante la normativa minutos antes de la votación”, explica Caballero. En línea similar, el portavoz manifiesta que el concejal de movilidad, Jesús Carbonell Aguilar, se puso en contacto con el PSOE para buscar acuerdos en beneficio de la ciudad. “Una negociación no puede basarse en líneas rojas ni en mezclar asuntos ajenos a la ZBE. Esperamos un diálogo leal y constructivo para gobernar en pro de la ciudadanía”, ha enfatizado Caballero respecto las peticiones socialistas para sacar adelante el texto de la ZBE.
A preguntas de los medios presentes, Caballero también ha defendido que la ordenanza debe “mejorar la salud de los valencianos sin castigar a las familias”, teniendo en cuenta situaciones como la de las familias más vulnerables o los vecinos afectados por la DANA, que “no pueden comprarse un TESLA o un vehículo eléctrico y han tenido que recurrir a coches de segunda mano”. Además, ha subrayado que la intención del Gobierno de Catalá es aprobar la ZBE “cuanto antes”, dentro del plazo legal para que entre en vigor antes del 1 de enero de 2028, y ha afirmado que es más sencillo “alcanzar acuerdos con el PSOE que con Compromís”, a quien ha reprochado querer “castigar a quien usa el coche”.
Proyectos aprobados
Durante la sesión celebrada por la mañana, la Junta de Gobierno Local ha aprobado también varios proyectos de inversión municipal “para seguir dando pasos en la transformación de la ciudad”, entre ellos nuevas infraestructuras ciclopeatonales, la rehabilitación de patrimonio histórico y mejoras en la gestión de residuos y saneamiento.
Entre los acuerdos adoptados, Caballero ha destacado la construcción de un itinerario ciclopeatonal, con motivo de la capitalidad Verde Europea 2024, que conectará el antiguo cauce del Túria y el puente de Astilleros, una actuación que “mejorará la seguridad y ampliará el espacio destinado a peatones y ciclistas”. “El proyecto, presupuestado con 2 millones de euros, ya tiene luz verde y garantizará una movilidad más segura y sostenible”, ha señalado.
También se ha aprobado el proyecto de rehabilitación de la alquería de Campanar, un edificio histórico municipal que será recuperado “para uso vecinal y cultural, como espacio cívico que refuerce la identidad del barrio”. La inversión asciende a 1,4 millones de euros, y el edificio se destinará a actividades culturales y asociativas. “Protegemos el patrimonio y lo recuperamos para convertirlo en un lugar de encuentro entre los vecinos”, ha destacado Caballero.
El equipo de Catalá también ha dado luz verde al soterramiento de ocho islas de contenedores, una actuación procedente de los presupuestos participativos que busca “mejorar la estética urbana, la limpieza y la eficiencia del servicio”. El proyecto, con una inversión de 1,12 millones de euros, beneficiará a los barrios de Nou Moles, Arrancapins, Benimàmet, Malilla, Benicalap, Torrefiel, Ciutat Jardí y La Bega Baixa, y permitirá un mejor reciclaje y separación selectiva de residuos.
Además, se ha acordado la contratación del suministro, instalación y puesta en marcha de la red de saneamiento digitalizada, valorada en 1,22 millones de euros, que permitirá “registrar el caudal de agua en tiempo real, anticipar incidencias y mejorar el control y la eficiencia del sistema”.
En materia deportiva, se ha aprobado la licitación para la renovación del césped artificial de los campos de rugby y fútbol del polideportivo de Quatre Carreres, así como del campo de fútbol de Orriols, con una inversión de más de 834.000 euros, para “garantizar condiciones de juego óptimas y seguras”.
Por último, el Ayuntamiento ha aprobado una subvención plurianual de 466.000 euros destinada a la Casa de la Caridad “para acompañar y garantizar comida y productos básicos a las familias más vulnerables de la ciudad, las personas sin techo o las que se encuentran en riesgo de exclusión social”.