Como cada año después de volver de las vacaciones de verano, la brújula de la fiesta señala al sur de la ciudad, primero a Sant Marcel·lí y, para acabar, al barrio de Patraix.Unas fiestas con una programación amplia y variada en la cual, también como cada año, ha participado la Escoleta El Trenet Cooperativa Valenciana.Este año, el cometido ha sido de altura, metafóricamente... y literalmente, y es que estos pequeños artistas se propusieron convertir los balcones de la plaza de Patraix en tendederos de arte. Es por eso que durante los últimos días, los niños y las niñas de 1 y 2 años de esta escoleta han pintado con pinceles pero también con uva, hilos, esponjas y, por supuesto, con su propio cuerpo, las sábanas que, desde ayer, cuelgan de los balcones de la plaza. Sábanas convertidas en bandera del placer de la creación compartida, y de esa mixtura de colores y sensaciones únicas que es el arte libre de los niños.
Colores, alegría, raíces, diversidad y futuro que ondean de una de las plazas más emblemáticas y vivas de la cabeza y casal.
Gracias por la información de la Escoleta del Trenet.