Valencia ha dado un nuevo paso firme hacia una ciudad más verde y sostenible. El Ayuntamiento ha presentado a vecinos, comerciantes y comisiones falleras el ambicioso proyecto de reurbanización de la plaza San Agustín, la avenida del Oeste y la calle San Vicente Mártir (entre plaza España y Guillem de Castro), con una intervención integral en más de 32.000 m² del centro de la ciudad.
Reunión participativa con vecinos, comerciantes y falleros
La reunión, celebrada esta tarde, ha estado presidida por los concejales Juan Giner (Urbanismo, Vivienda y Licencias) y Jesús Carbonell (Movilidad y Policía Local), quienes han compartido todos los detalles del proyecto junto a los redactores del mismo. Al encuentro asistieron representantes de la Federación de Asociaciones de Vecinos, asociaciones como Amics del Carme, Amics de Velluters, El Palleter y La Roqueta, además de comerciantes del centro histórico y asociaciones como AICSE, FAGA y AIVAV.
También participaron miembros de las comisiones falleras Linterna-Na Robella, Avenida del Oeste-Velluters y San Vicente-Periodista Azzati, cuyas plantás se verán directamente afectadas por el nuevo diseño del espacio urbano.
El propósito de esta reunión, según ha explicado Juan Giner, “es recoger las impresiones y las propuestas de los vecinos, comerciantes y colectivos festivos para que el equipo de arquitectos y urbanistas que ha redactado el proyecto, junto con los distintos servicios municipales implicados, las analice y, en la medida de lo posible, las incorpore al proyecto definitivo de obras que deberá después licitarse”. La Junta de Gobierno del Ayuntamiento aprobó, el 11 de octubre de 2024, el encargo de la redacción del proyecto de reurbanización al equipo de profesionales que resultó ganador del concurso de ideas que se convocó en diciembre de 2021.
Más zonas verdes, sombra y aceras amplias
El proyecto prevé una transformación profunda del paisaje urbano con 382 árboles, de los cuales 285 serán nuevos, distribuidos en cinco especies diferentes. Junto con más de 1.800 m² de zonas verdes, entre parterres, alcorques y jardineras elevadas, se logrará un entorno más sostenible y saludable para residentes y visitantes.
Uno de los cambios más relevantes será la creación de 13.756 m² de espacios peatonales, ganando casi 3.800 m² adicionales respecto al diseño actual. Este nuevo espacio se protegerá con cobertura vegetal para mejorar el confort térmico, reducir el ruido y fomentar la movilidad a pie.
Cambios clave en las vías
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Avenida del Oeste: se reducirá un carril de circulación y se mantendrán dos carriles (uno por sentido). Las aceras se duplicarán en anchura y estarán arboladas, mejorando la accesibilidad y el entorno comercial.
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Calle San Vicente Mártir (tramo plaza España – San Agustín): tendrá aceras más amplias, tres carriles de tráfico y un nuevo carril bici, todo protegido con vegetación.
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Plaza San Agustín: mantendrá su carácter peatonal, con nuevos bancos de piedra, fuente a ras de suelo, parterres y sombra natural de enredaderas, configurando un espacio urbano más acogedor.
Impacto en la movilidad y el transporte público
El nuevo diseño mantendrá la operatividad de 11 líneas de la EMT de Valencia (7, 9, 10, 11, 27, 31, 60, 62, 70, 71 y 73), que contarán con 7 paradas en:
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Plaza España con Julio Antonio
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Plaza España con San Vicente Mártir
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Avenida del Oeste con plaza España
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Mercat Central-Beata
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Avenida del Oeste-Roger de Flor
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Avenida del Oeste-San Agustín
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Avenida del Oeste-Hospital
Reubicación del mercado semanal y las Fallas
El tradicional mercado semanal con 38 puestos que actualmente ocupa la avenida del Oeste será reubicado en la calle del Hospital, en una zona de alta afluencia peatonal cercana a la estación de Metrovalencia de Ángel Guimerà. Este nuevo emplazamiento ofrecerá más espacio para los puestos y una mejor integración con la dinámica urbana.
En cuanto a las Fallas, el proyecto contempla una reordenación del espacio público para permitir la instalación temporal de los monumentos de las tres comisiones presentes en la zona: Periodista Azzati, Avenida del Oeste-Velluters y Llanterna-Na Rovella. El diseño busca garantizar la continuidad de la tradición fallera sin comprometer la nueva configuración del entorno.