De las más de 200 oficinas que se dañaron por el mayor temporal vivido en la Comunitat Valenciana, son 54 las farmacias que continúan cerradas en la provincia de València. Además, tras una semana del paso de la DANA, los municipios de Paiporta y Benetússer continúan sin tener ningún establecimiento de medicinas operativo. No obstante, el secretario del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Valencia (Micof), Vicente Colomer ha asegurado que el suministro de medicamentos está garantizado en todas las zonas afectadas. De hecho, ha pedido calma a la población, afirmando que “nadie se va a quedar sin medicación” porque no hay riesgo de desabastecimiento.
Para hacer frente a la demanda de medicación, se han preparado botiquines de catástrofe. En Paiporta se ha instalado un sistema de emergencia de servicios de farmacia de atención primaria, que se encargan de preparar los tratamientos que requieren los residentes y se llevan al centro de salud, donde se distribuyen. En cambio, en Benetússer la situación es considerablemente más favorable, ya que existen farmacias abiertas en las poblaciones cercanas.
"No acaparar"
Los elementos sanitarios más demandados son las mascarillas, cuyo uso es necesario para prevenir posibles infecciones en las tareas de limpieza y los analgésicos. "La gente está cansada, machacada de tanto trabajo y eso produce dolor", ha explicado el secretario general del Micof. No obstante, Colomer ha pedido a los valencianos que no hagan acopio de medicinas, puesto que el acceso al tratamiento está confirmado para todos los vecinos.
Asimismo, el portavoz de los farmacéuticos ha insistido en la peligrosidad de realizar donaciones de medicamentos y ha demandado a la población que dejen de hacerlo. “Puede suponer un gran riesgo para la salud pública utilizar medicinas que han salido del canal oficial de distribución”, sentencia.
Por su parte, el Micof ha puesto a disposición de la ciudadanía una bolsa de voluntarios, que actualmente cuenta ya con un total de 438 farmacéuticos. Estos están colaborando en las tareas de despeje de escombros en las farmacias dañadas, así como en la colocación del mobiliario y la ayuda en la dispensación de los tratamientos.
Colomer ha agradecido las labores de estas personas, que considera que están realizando un “gran esfuerzo” teniendo en cuenta que muchos establecimientos de medicinas han quedado completamente inutilizables. “Han tenido que traer el ordenador y mesas plegables de casa, trabajan como pueden, comprando incluso una nevera pequeña para poder salir del paso y garantizar la refrigeración de los medicamentos que lo requieren como las insulinas", explica el secretario general.
En adición, se ha abierto una línea de ayuda directa para los farmacéuticos afectados por la DANA : --ES92 2100 8681 5102 0012 2191 y BIC/CÓDIGO SWIFT: CAIXESBBXXX-- para que puedan restaurar lo más pronto posible el servicio farmacéutico. Las autoridades sanitarias han habilitado además el teléfono '965 918 658' para facilitar a pacientes crónicos el acceso a los medicamentos que necesitan y tienen prescrito.