Marrakech, conocida como la ciudad roja por los colores de sus edificios y las tonalidades predominantes a su entorno, es una de las ciudades más pintorescas y exóticas y, a la vegada, más cercanas a casa nuestra. Sus callejones son auténticos laberintos y muchos de ellos acaban en culo-de-saco. Aún así, el atractivo principal de la ciudad es la extensa plaza Jamaa lo Fna, el centro de la vida pública de la ciudad. Allá, durante el día, podremos encontrar cuenta-cuentos, domadores de simios o de serpientes, y algunos lugares donde comprar zumo de naranja natural o varias especies. Durante la noche, en cambio, se convertirá en un nuevo de paradetes donde poder cenar, músicos improvisados y espectáculos de diferentes tipos.
No podéis marchar de Marrakech sin ir al Zoco, un laberinto de callejones llenos de paradetes donde comprar todo tipos de cosas: desde ropa a especies, artesanía y, por supuesto, productos típicos. Recordáis regatear siempre el precio que os ofrecen y, si queréis un consejo, es mejor ir por la mañana y sin prisa para poder disfrutar de una experiencia única.
Superficie: 230 km².
Ubicación: Al sur del Marruecos y en el interior se encuentra la ciudad de Marrakech, una de las cuatro ciudades imperiales del país junto con Fez, Rabat y Mequinez.
Población: Más de un millón y medio de habitantes.
Economía: La economía del Marruecos es la de un país emergente: en los últimos años el gobierno ha privatizado algunas empresas públicas. El sector de los servicios y concretamente el del turismo, es el que tiene más fuerza y uno de los factores más importantes para la producción económica. Lo sigue el sector d ele industria que se dedica sobre todo al textil, la minería y la electrónica. La agricultura también tiene un peso importante, con exportaciones de cítricos, legumbres y pescado.
Curiosidades: La moneda oficial del Marruecos es el Dírham marroquí –10 dh equivalen a un euro–, pero no se extraño que tenderos, mercaderes y, incluso, taxites y hoteleros, aceptan euros.