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El Covid-19 está afectado a todo un país. Esta pandemia global aumenta, cada día, el número de nuevos casos de contagio y, en algunos puntos, ha puesto en jaque al sistema sanitario. Por eso, en la Comunitat Valenciana, el Consell trabaja para aplicar medidas que fortalezcan la sanidad pública para poder hacer frente a todos los escenarios posibles. Así, además de poner en marcha el número 900 300 555 o activar un autotest en la web de la conselleria de Sanidad con el objetivo de informar a la ciudadanía sobre el coronavirus, y evitar desplazamientos innecesarios a los centros de salud, también se han sumado otras medidas de refuerzo sanitario.
En este sentido, y tras el aumento de casos en la Comunitat Valenciana, la consellera de Sanidad, Ana Barceló, anunció no solo la suspensión de vacaciones y permisos del personal sanitario – excepto para mujeres embarazadas – para contar con todo el personal posible, sino también la apertura de una bolsa para que aquellos profesionales jubilados o titulados sin especialidad puedan incorporarse para combatir el coronavirus.
Esta bolsa, que está abierta desde el pasado viernes, 20 de marzo, tiene como objetivo nutrir de personal sanitario a los diferentes hospitales del territorio valenciano para contar con una mayor capacidad de respuesta, "evitando que se colapse el sistema valenciano de salud".
A estas acciones, se le suman otras iniciativas como la supresión de la caducidad de las tarjetas SIP o la prórroga de recetas para evitar los desplazamientos de la población a los diferentes centros de salud. En este sentido, Barceló también anunció que para quienes necesitasen fármacos hospitalarios se pondría a disposición de la ciudadanía la posibilidad de acercar los medicamentos o al domicilio del paciente o a su centro de salud.
Las últimas medidas que se han dado a conocer ha sido tanto la habilitación de una zona de la antigua Fe, como de la construcción de tres hospitales de campaña. "La situación, en estos momentos, es de garantía asistencial hospitalaria y está funcionando adecuadamente el sistema de salud valenciano, que está demostrando su potencial, sobre todo, gracias a los profesionales sanitarios, que están trabajando intensamente". No obstante, "esta intervención se llevará a cabo para ampliar el número de camas por si fueran necesarias", explicaba el president de la Generalitat, Ximo Puig.
Así, en primer lugar, se prevé que, para finales de esta semana, la zona habilitada del antiguo hospital La Fe esté lista para acoger un total de 76 camas. Y es que, con tres turnos de 8 horas cada uno, las obras habilitarán este área, perteneciente a la antigua Escuela de Enfermería, con todas las garantías de seguridad e higiene.
Por otro lado, la consellera de Justicia, Gabriela Bravo, ya ha formalizado el contrato para levantar tres hospitales de campaña que, en su conjunto, contará con 1.100 plazas – 500 en València, 400 en Alicante y 200 en Castelló –. Así, mientras la mitad de todas estas camas estarán disponibles en dos semanas, habrá que esperar un mes para llegar a la totalidad de plazas.
Los tres centros provisionales serán construcciones prefabricadas y desplegables que estarán conectadas entre sí mediante túneles completamente aislados del exterior. De esta manera, el de València se ubicará en una parcela próxima al Hospital La Fe; el de Alicante se situará en el aparcamiento contiguo al Hospital General; y, finalmente, en el caso de Castelló, se creará en los espacios disponibles entre las inmediaciones de sus dos grandes hospitales.
Estas instalaciones "podrán ser utilizadas de nuevo por la Agencia Valenciana de Seguridad y Respuesta a las Emergencias" cuando esta crisis sanitaria pase. Por el momento, se prevé que los contagios por coronavirus continuarán subiendo a lo largo de esta semana.