Miércoles uno de enero, primer día de 2020. Es, también, el primer día de una reivindicación histórica que se ha formalizado; la gratuidad de la AP-7 (aunque su nombre dejará de ser AP, de Autopista de Peaje). Una esperada 'liberalización' por parte de muchas poblaciones que sufrían el paso de transporte pesado; tanto que incluso hubo algunos que celebraron el año, ya de madrugada, como los primeros que evitaban el pago. Los coches, hasta el 31, debían pagar 45,9€ por realizar todo el tramo de la Comunitat Valenciana.
Desde hoy la conexión por carretera entre Alacant y Tarragona, a su paso por València, Castelló y muchas otras localidades, es más rápido y seguro sin necesidad de pagar más; incluso, por el tipo de carretera, es más barato. El domingo de la semana pasada, desde el Ministerio de Fomento, se señalaba uno de los últimos elementos a conocer para abordar el mantenimiento de una carretera que, a partir de ahora, correrá por parte de la Administración Central.
Según el estudio de Fomento, dirigido por el valenciano José Luís Ábalos, levantar las barreras -y eventualmente eliminar las 'casetas' de cobro-, significará un aumento del 30% del tráfico de esta carretera. Según este mismo informe, el Estado toma la carretera con buenas sensaciones; el estado de conservación de los tramos de pagos gestionados, hasta hace dos días, por la concesionaria Abertis, están en buen estado. Se trataba de un tema a estudiar pues en Madrid, con las radiales rescatadas, hubo que reclamar a la anterior concesionaria por el mal estado de estas.
Aunque el fin del pago de la AP-7 también significa perder recaudación en impuestos de los ayuntamientos por los que discurría, la proclama general es que los beneficios ganan a dichas cuantías; localidades del tramo de la N-332 reducirán el ruido, contaminación y aumentaran su seguridad vial gracias al desvío del tráfico pesado y gran parte de turismos. Algo que, sin embargo, significa también la pérdida de ingresos de restaurantes y zonas de descanso de estas carreteras nacionales.
Aún con el fin de las barreras, todavía quedan reivindicaciones y trabajos relativos a la AP-7. Si bien ahora es gratis su uso entre Sant Joan d'Alacant i Vinaròs, casi toda la Comunitat Valenciana al completo, todavía sigue pendiente mejorar las conexiones de la Comunitat con Andalucía, Murcia y Catalunya. Así, entre Alacant y la Región de Murcia, hasta el municipio de Vera, todavía se tendrá que pagar -aunque hay viales alternativos-. La concesión de este tramo, salvo imprevistos, es hasta el 15 de febrero de 2040.
En el tramo de la Comunitat, hasta el norte de Castelló, hay otras obras que llevar a cabo; la construcción de nuevos viales de acceso para que las poblaciones cercanas a la autopista puedan acceder si tener que dar 'rodeos'. A partir de Vinaròs el peaje deja de ser gratuito hasta La Junquera, la frontera con Francia. Sin embargo en este tramo sí hay fechas; la concesión se acaba el 31 de agosto de 2021.