Cada verano, el firmamento se convierte en escenario de uno de los espectáculos naturales más fascinantes del calendario astronómico: la lluvia de estrellas de las Perseidas. Este fenómeno se produce cuando la Tierra cruza la órbita del cometa Swift-Tuttle y choca con miles de pequeñas partículas desprendidas por él. Aunque las percibimos como estrellas fugaces, en realidad son motas de polvo del tamaño de un grano de arena que, al entrar en contacto con la atmósfera a gran velocidad, se volatilizan y generan un destello luminoso.
Este 2025, las Perseidas serán visibles desde el 17 de julio, pero su pico máximo de actividad llegará entre el 11 y el 13 de agosto, siendo la noche del 12 al 13 la idónea para verlas, con una estrella fugaz visible cada dos minutos. Por su coincidencia con la festividad de San Lorenzo, el 10 de agosto, en España también se las conoce como Lágrimas de San Lorenzo.
En la provincia de Valencia existen múltiples enclaves ideales para disfrutar del fenómeno con buena visibilidad, cielos despejados y escasa contaminación lumínica. A continuación, te especificamos cuáles:
Aras de los Olmos
Ubicado en el Alto Turia, Aras de los Olmos es uno de los catorce mejores lugares del mundo para ver las estrellas. Con menos de 400 habitantes y un observatorio astronómico, este pequeño municipio se ha consolidado como destino de referencia para el turismo estelar. Su cielo despejado y la ausencia de contaminación lumínica lo convierten en un auténtico paraíso durante esta fecha.
Titaguas
Este municipio acoge cada noche, del 11 al 15 de agosto, una completa velada astronómica organizada por la Escuela de Cosmofísica. La actividad, que se celebra de 21:00 a 02:00 horas, incluye una cena buffet con productos locales, proyecciones de imágenes del Universo, un planetario 3D que explica el fenómeno de las Perseidas, observación telescópica de planetas y estrellas, y, por supuesto, la contemplación del cielo nocturno en su momento de mayor esplendor. El precio por persona es de 45 euros para adultos y 30 euros para niños menores de 9 años. Además, se ofrece alojamiento en apartamentos y albergue con literas a precios reducidos.
Alpuente
Esta localidad de la comarca de Los Serranos no solo destaca por su valor histórico y patrimonial, sino también por la calidad de su cielo nocturno. Alejado de las grandes urbes y con escasa contaminación lumínica, Alpuente se ha convertido en un destino perfecto para disfrutar del firmamento en verano.
La Yesa
La Yesa alberga el observatorio astronómico El Alto Negro, un enclave privilegiado para la observación del cielo. Situado en plena naturaleza, permite contemplar fenómenos astronómicos como las Perseidas con la máxima nitidez gracias a la ausencia de luz artificial.
Chera
Chera es otro de los grandes tesoros naturales de la Comunitat Valenciana para los aficionados a la astronomía. Su ubicación, rodeada de montañas y alejada de grandes focos de contaminación lumínica, convierte este municipio en un lugar ideal para disfrutar de la lluvia de estrellas.
Playa del Saler
Para quienes prefieran no alejarse demasiado de la ciudad, la playa del Saler es una opción muy recomendable. A solo 13 kilómetros del centro de Valencia, ofrece buenas condiciones para la observación astronómica gracias a su relativa oscuridad. Se puede acceder en transporte público, mediante las líneas 24 y 25 de la EMT.
Playa de Pinedo
También cercana a la capital, la playa de Pinedo ofrece una experiencia cómoda y accesible para quienes deseen ver las Perseidas sin alejarse demasiado. Aunque se encuentra próxima a la ciudad, su nivel de contaminación lumínica es menor que el de otras playas urbanas. Se en autobús con las líneas 23, 24 y 25.
Parque de Cabecera
Quienes prefieran permanecer dentro de la ciudad pueden optar por el Parque de Cabecera. Este gran pulmón verde en el distrito de Campanar ofrece una visión aceptable del cielo nocturno, aunque algo limitada por la iluminación urbana. Se accede fácilmente en transporte público, con varias líneas de EMT y metro que conectan con la parada 9 d’Octubre.
Mirador del Garbí
Para una experiencia más aventurera y completamente alejada de la civilización, el mirador del Garbí, en Estivella, es una de las mejores alternativas. Rodeado de naturaleza y con vistas despejadas, es perfecto para quienes deseen observar las Perseidas con tranquilidad. Se encuentra a unos 45 minutos en coche de Valencia.