Este verano, los viajeros valencianos tienen una oportunidad única para descubrir Islandia. A partir del 22 de julio, la aerolínea PLAY inaugura su ruta directa entre Valencia y Reikiavik, con dos frecuencias semanales, conectando el Mediterráneo con los paisajes salvajes del norte. Un plan perfecto para disfrutar de todas las maravillas que esconde este país nórdico: desde playas de arena negra hasta formaciones rocosas que te dejarán sin palabras.
Además, ahora, viajar a Islandia será más accesible que nunca con las tarifas competitivas de PLAY. Así, si buscas un verano fuera de lo común, aquí van los 5 imprescindibles de Islandia que no pueden faltar en tu itinerario:
1. Reynisfjara, la playa que parece de otro planeta
A pocos kilómetros de Vík í Mýrdal, en la costa sur, se encuentra una de las playas más impactantes del mundo. Reynisfjara, con su arena negra de origen volcánico y sus formaciones de columnas de basalto que parecen obra de gigantes, ofrece un paisaje tan dramático que ha servido de escenario para películas y series como Juego de Tronos. Eso sí: aquí el baño está prohibido debido a las traicioneras "sneaker waves", olas que llegan sin avisar. Pero contemplar este espectáculo natural desde la orilla ya es, de por sí, una experiencia inolvidable.
2. Diamond Beach, donde el hielo brilla
En las cercanías de la laguna glaciar Jökulsárlón se encuentra Diamond Beach, una playa que hace honor a su nombre. Decenas de bloques de hielo flotante, desgajados del glaciar, descansan sobre la arena negra como si fueran diamantes fundiéndose al sol. El contraste entre el hielo transparente y la oscuridad del suelo crea un paisaje fotogénico, mágico y casi onírico. Un lugar perfecto para capturar la esencia más surrealista de Islandia con tu cámara (o tu móvil).
3. Djúpalónssandur, historia y naturaleza se fusionan
Mucho menos conocida, y por tanto más tranquila, es Djúpalónssandur, una playa en la península de Snæfellsnes que guarda ecos del pasado. Sus guijarros negros esconden los restos de un barco pesquero naufragado en 1948, y allí aún descansan las “piedras de fuerza” con las que los marineros islandeses medían su potencia física. Una visita perfecta para quienes buscan combinar naturaleza, historia y un aire de misterio en un solo lugar.
4. Hvítserkur, el lugar perfecto para ver la fauna marina
En la península de Vatnsnes se levanta Hvítserkur, una impresionante formación de basalto de 15 metros que, según a quién le preguntes, se asemeja a un dragón, un rinoceronte o un troll petrificado por la luz del amanecer. Más allá de su silueta mítica, esta playa del noroeste ofrece la oportunidad de observar focas en libertad y una variada fauna marina. Ideal para los amantes de la fotografía y los que buscan un contacto más profundo con la naturaleza islandesa.
5. Solheimasandur, el lugar que esconde el avión más fotografiado
En medio de una playa volcánica de aspecto casi lunar se encuentra uno de los lugares más fotografiados de Islandia: el avión DC3 de la marina estadounidense que realizó un aterrizaje de emergencia en 1973. Aunque el acceso requiere una caminata de unos 45 minutos, el esfuerzo merece la pena. El fuselaje oxidado, solitario en medio de la nada, transmite una sensación postapocalíptica que no se olvida fácilmente.
Una babymoon de película
Además, para las futuras madres, Islandia es también un destino perfecto para una babymoon diferente. Desde baños en aguas termales con propiedades minerales hasta masajes prenatales en spas como Blue Lagoon Float & Spa o el Hilton Reykjavik Spa, todo está pensado para ofrecer descanso, belleza y conexión con la naturaleza. Y si se viaja en pareja, nada como una sesión de fotos rodeados de glaciares o incluso una revelación del sexo del bebé a bordo de un vuelo de PLAY, como ya ha ocurrido recientemente en pleno Atlántico Norte.
Con vuelos directos a Reikiavik desde ocho ciudades españolas —y a partir del 22 de julio, también desde Valencia— PLAY te invita a redescubrir el verano.