No sólo la Ofrenda está de celebración este año, se cumplen 75 años desde que la Falla San Vicente-Periodista Azzati entregara las primeras flores a la Geperudeta. Este 2017 también se cumplen 30 años desde que los vestidores de la Mare de Déu comenzaran a tejer su manto tal cual hoy lo conocemos. La actual imagen, la que ampara desde sus 15 metros de altura a todos los valencianos, fue instalada por primera vez en 1987 y es obra del artista fallero José Azpeitia. La idea de instalar esta monumental imagen que no deja indiferente a nadie fue del vestidor Pedro Llorca y del artista fallero José Carrero quienes propusieron a Junta Central Fallera la idea y finalmente fue aprobada y llevada a cabo. Actualmente, los vestidores de la Virgen lo componen 39 personas, en la que se juntan tres generaciones familiares, que de forma voluntaria y totalmente altruista diseñan, elaboran y confeccionan el manto y el tapiz año tras año.
Tal vez uno de los secretos mejor guardados sea el diseño del manto que poco a poco se va dando a conocer conforme las falleras van depositando los ramos y los bordadores van tejiendolo. Ese secreto se idea a lo largo del año. “Trabajamos en ello durante el año. Somos 7 los responsables que aportamos ideas y sobre elles descartamos bocetos o añadimos coses hasta que al final tenemos claro lo que vamos a hacer. Somos tradicionales, lo hemos hecho así toda la vida. No nos gusta que se sepa porque se pierde le encanto de lo que hacemos, de como empieza y que es lo que acaba. No nos gusta que se de a conocer”, señala Rafa.