El ascenso de temperaturas que había dado un ligero respiro a la Comunitat Valenciana en los últimos días ha resultado ser un espejismo. La llegada de una masa de aire polar acompañada por una borrasca y un frente frío ha devuelto, desde este miércoles, un ambiente invernal más propio de enero que de finales de noviembre. La Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) ya había advertido del brusco giro meteorológico y, efectivamente, los termómetros han iniciado un desplome generalizado que se prolongará a lo largo de la semana.
Pero el frío no es el único protagonista de este episodio, ya que el viento se ha convertido en el fenómeno más adverso. De hecho, la Comunitat Valenciana se encuentra en aviso naranja por rachas muy fuertes que podrían provocar desprendimientos, caídas de ramas, complicaciones en carreteras y riesgos en zonas de costa.
La jornada de este miércoles 26 de noviembre viene marcada por cielos poco nubosos o despejados en casi toda la autonomía, aunque con intervalos de nubes durante la mañana en el interior de la mitad norte. El ambiente se mantiene frío, con un ligero descenso de las temperaturas y con las mínimas alcanzándose al final del día.
Jueves: heladas generalizadas y mínimas bajo cero en el interior
Para mañana jueves 27 de noviembre, AEMET prevé una jornada estable, con predominio del cielo despejado y con temperaturas mínimas que volverán a descender, generando heladas débiles en áreas del interior de la Comunitat. Las máximas, en cambio, experimentarán un ligero ascenso, más evidente en las comarcas del interior norte.
En Castellón, el viento del noroeste mantendrá cierta intensidad durante las primeras horas, con rachas que seguirán siendo muy fuertes, aunque la tendencia será a que amaine progresivamente a partir de la tarde. En el resto de la Comunitat el viento soplará flojo del oeste, debilitándose con el paso de las horas.
Las temperaturas del jueves evidenciarán el alcance de la irrupción de aire polar. En las zonas más frías de Castellón, como Vilafranca del Cid, Morella o Castellfort, la madrugada comenzará cerca o por debajo del cero, mientras que las máximas seguirán rondando valores muy contenidos para esta época. Localidades del interior como Cinctorres, Barracas o Bejís vivirán un ambiente casi invernal, mientras que municipios del litoral, como Castellón de la Plana, Benicàssim, Xilxes o Peñíscola, se moverán entre mínimas frescas y máximas en torno a los 16 o 17 grados.
En la provincia de Valencia el ambiente será igualmente frío, especialmente en el interior. Zonas como Venta del Moro, Ayora, Utiel o Requena amanecerán con temperaturas cercanas a los cero grados o incluso por debajo. Hacia el litoral, los valores serán algo más suaves, pero seguirá registrándose un descenso significativo. La ciudad de Valencia apenas superará los cuatro o cinco grados de mínima, mientras que localidades como Sagunt, Cullera o Gandia se moverán en registros ligeramente superiores, aunque fríos para finales de noviembre.
La provincia de Alicante también notará este repunte invernal, sobre todo en las comarcas del interior. Municipios como Ibi, Castalla, El Pinoso, Salinas o Villena llegarán a situarse entre los cero y los dos grados bajo cero en las mínimas, mientras que poblaciones como Xixona, Alcoy, Cocentaina o Elda comenzarán el día con valores ligeramente por encima del cero. En la franja litoral, desde Dénia y Jávea hasta Calpe, Benidorm, Alicante o Torrevieja, el frío será más moderado, con mínimas entre los cinco y ocho grados.
El viernes 28 de noviembre se caracterizará por un tiempo algo más estable. AEMET prevé intervalos de nubes altas, un ambiente más templado y un ligero ascenso generalizado de las temperaturas, tanto mínimas como máximas. El viento soplará flojo del oeste durante las primeras horas, girando hacia el este en las horas centrales.
Pese al ascenso de los termómetros, localidades como Vilafranca, Morella o Barracas continuarán amaneciendo con valores muy fríos. En Valencia y Alicante, los municipios del interior recuperarán tímidamente algunos grados, mientras que las zonas costeras podrán alcanzar máximas cercanas a los 18 o incluso 19 grados, especialmente en áreas del sur como Elche, Dénia o Alicante.
Fin de semana: nubosidad variable y regreso de los chubascos
El sábado 29 de noviembre mantendrá la estabilidad relativa alcanzada el día anterior. La previsión apunta a intervalos nubosos y temperaturas que podrían experimentar un ligero ascenso o mantenerse sin grandes cambios. El viento volverá a ser flojo, aunque con posibilidad de que gane algo de intensidad al final del día.
Por contra, el domingo 30 de noviembre volverán los chubascos. AEMET anuncia intervalos nubosos y precipitaciones que podrán darse en cualquier punto de la Comunitat Valenciana, aunque con mayor incidencia en el interior de Castellón y en zonas de costa tanto de Valencia como de Alicante. La llegada de estas lluvias podría coincidir con un nuevo descenso de las temperaturas, lo que prolongaría el ambiente invernal.
En definitiva, la irrupción de esta masa de aire polar devolverá durante varios días un escenario meteorológico típicamente invernal a la Comunitat Valenciana. Las heladas en el interior, las mínimas bajo cero, el viento intenso y la sensación térmica gélida en amplias áreas del territorio marcarán una semana en la que el otoño volverá a quedarse en segundo plano frente a un anticipo del invierno.