El Ciutat de València quería una fiesta desde el inicio y así lo hicieron. Las casi 19.000 almas que hasta Orriols se desplazaron animaron a los once elegidos para intentar este primer asalto real a la Primera División del fútbol español. El tifo inicial, los cánticos y los ánimos hicieran que el Levante saliera al campo con hambre del ascenso, con ganas de hacerse el dueño del partido y lograr los ansiados tres puntos que le llevaran al cielo. y lo lograron ya en la segunda parte, en el minuto 55 Postigo remataba de cabeza un balón que valía el ascenso, que valía el regreso a Primera.
La primera parte se convirtió en un asedio granota a la portería del Oviedo quien tuvo como principal protagonista a Juan Carlos que se encargaba de desbaratar las claras ocasiones de gol granotas. Con el paso de los minutos el Ciutat de València se fue enfriando y con ello su equipo contagiándose. Sin embargo, el Oviedo no encontraba su sitio en el campo pues el buen planteamiento del conjunto granota en defensa y la buena colocación en el campo no le permitía pensar con claridad. A pesar de todo, el conjunto de Fernando Hierro iba dejando pasar los minutos esperando que su ocasión surgiera bien a balón parado o bien por algún despiste producido por la ansiedad de ese gol que le pusiera casi los pies en Primera. Los últimos minutos dieron para alguna ocasión más que el colegiado frenó por fuera de juego, para que Roger entregará el balón suavemente a los pies de Juan Carlos en lugar de perforar la portería y alguna llegada del Oviedo que Raúl Fernández salvó sin mayores problemas. Al descanso 0-0 en el marcador.