No es una inocentada, a pesar de ser 28 de diciembre. El Festivern 2025 se cancela de forma definitiva como consecuencia del temporal de lluvias que ha azotado la provincia de València y toda la franja mediterránea desde el pasado día de Navidad; y se ha recrudecido durante este domingo.
La tormenta que se ha formado esta mañana en la comarca de la Safor, que descarga con fuerza en el prelitoral sur de València en plena alerta naranja, ha sido definitiva en la decisión. Este episodio, con una banda estacionaria en la montaña de la Safor y localidades de la Ribera, está siendo localmente muy fuerte, con acumulados de hasta 40 l/m2 en una hora.
El temporal ha dejado un panorama impracticable en Tavernes de la Valldigna justo en la jornada en la que el festival debía ultimar los preparativos para recibir a miles de asistentes entre el lunes 29 y el miércoles 31 de diciembre. El agua acumulada y el barro han convertido el recinto en un espacio “inservible”, obligando a la organización a tomar esta drástica decisión.
Recinto anegado y sin garantías
La organización del Festivern ha anunciado oficialmente la cancelación del evento tras evaluar el estado de las instalaciones y reunirse con el Centro de Coordinación Operativa Municipal (Cecopal). En un comunicado, explican que “hoy por hoy, ni trabajadores, ni músicos ni público podríamos disfrutar de este espacio con las garantías mínimas de seguridad y no lo podemos permitir”.
El recinto de conciertos y la zona de acampada se encuentran completamente inundados y el terreno, convertido en un barrizal, impide cualquier tipo de actividad segura. El festival subraya que, pese al esfuerzo realizado en los últimos días, las condiciones meteorológicas han ido empeorando.
Tal y como detallan en el comunicado, en el casco urbano de Tavernes se han acumulado más de 177 litros por metro cuadrado en los últimos dos días, una cifra que ha acabado por hacer “inviable” llegar a tiempo para ofrecer “las mínimas condiciones de seguridad y confort” a asistentes y trabajadores. Continuar adelante, insisten, “sería una irresponsabilidad”.
Intentos fallidos y una decisión dolorosa
Desde la organización también se pone en valor la implicación del Ayuntamiento de Tavernes de la Valldigna, que ha trabajado “a contrarreloj” para intentar salvar el festival. Sin embargo, reconocen que “a pesar de los intentos para habilitar zonas para albergar a todos los que tenían abono con acampada, es imposible acogerlos a todos y a todas”.
Las zonas de tráfico, el propio recinto y las infraestructuras técnicas se encuentran en el mismo estado de afectación. Las lluvias han dañado barras, cabinas de trabajadores, camerinos y áreas de carga y descarga, lo que impide desarrollar la actividad en condiciones dignas durante tres días para las cerca de 150 personas que forman parte del equipo del Festivern.
“No son condiciones adecuadas para trabajar”, remarcan. La organización admite estar “dolida” por no poder reencontrarse con su público, agradece el trabajo realizado en circunstancias extremas y avanza que la devolución de las entradas se realizará de forma automática en un plazo máximo de 15 días, mientras ya esperan su regreso en 2026.