Buenas noticias para el mundo fallero. La Conselleria de Sanidad ha autorizado la celebración de las Fallas de 2021 para el próximo mes de septiembre - del 1 al 5 -. Así, siempre y cuando se ratifique en la próxima asamblea de presidentes y presidentas de las distintas comisiones falleras, los monumentos falleros, que permanecen guardados desde hace más de un año, volverán a inundar las calles de la ciudad.
No obstante, lo que ha quedado claro en la reunión entre Sanidad y representantes del sector es que no serán unas Fallas al uso. De hecho, las comisiones tendrán que reinventarse para mantener vivo ese espíritu fallero que tanto caracteriza a las fiestas josefinas, pero sin llevar a cabo actos que impliquen una importante masificación. Así, los actos que ha autorizado Sanidad son: la plantà y la cremà, así como otros actos de calle que, pese a que se tendrá que terminar de ajustar, sí que incluye una Ofrenda de varios días, el concurso de fallas con premios y la habilitación de espacio público para la reunión de los falleros y falleras. Asimismo, está la posibilidad del disparo de mascletàs y castillos descentralizados para evitar aglomeraciones.
Por supuesto, quedan descartadas las verbenas, discomóviles y otras actividades en las que no se pueda garantizar el control del aforo. Aun así, esta situación podría mejorar en función de cómo evolucione la pandemia. Y es que el mismo presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha anunciado que "en 100 días, alcanzaremos la inmunidad de grupo", es decir, el próximo 18 de agosto. Una situación que permitiría tener controlada la pandemia de la Covid-19.
Sin embargo, "nunca serán las Fallas que conocemos", ha puntualizado el president de la Generalitat, Ximo Puig, que ha explicado que supondría "cerrar el ciclo que se inició con la cancelación de las Fallas de 2020". Así, ha dejado claro que la idea es poder celebrar las Fallas en septiembre "si antes se logra vacunar al 70% de la población". Una decisión que también afectará a distintas fiestas de carácter patronal y local y que siempre se tomará "bajo criterios de sanidad y de seguridad de las personas".
En este sentido, Puig ha apelado a la prudencia para "transitar hacia la normalidad". En estos momentos, la situación epidemiológica de la Comunitat Valenciana es muy positiva, con una incidencia por debajo de los 50 casos por cada 100.000 habitantes y con menos de 200 personas ingresadas, un nivel que no se veía desde el pasado mes de agosto.