La constante lucha por salvar el Cabanyal

Els veïns fa anys que reivindiquen unes millores que, encara, no han arribat

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Foto: facebook.com/Plataforma-Salvem-el-Cabanyal Foto: facebook.com/Plataforma-Salvem-el-Cabanyal

Muchos han sido los que se han involucrado en la defensa del Cabanyal. Sin embargo, la plataforma 'Salvem el Cabanyal', integrada por vecinos y vecinas de este barrio marinero, han luchado, durante muchos años, contra el Plan Especial de Protección y Reforma Interior (PEPRI), que amenazaba la integridad del barrio.

Este plan, aprobado por el anterior gobierno valenciano en 1998, contemplaba la prolongación de la avenida Blasco Ibáñez hasta el mar. Esta medida suponía no solo la destrucción de un gran número de viviendas, sino también la destrucción de un conjunto arquitectónico y un patrimonio declarado Bien de Interés Cultural (BIC).

A partir de aquel momento, la movilización de los vecinos del barrio del Cabanyal fue clave para evitar que este plan urbanístico se llevara a cabo. La Asociación de Vecinos, junto con la plataforma 'Salvem el Cabanyal-Canyamelar', comenzaron una ardua lucha contra el gobierno valenciano del Partido Popular.

Comenzaban años de duro trabajo: Un escrito en el que se pedía una nueva planificación urbana que no supusiera la división en dos del barrio, y que consiguió alrededor de 3.000 firmas, asambleas, manifestaciones… Una gran lucha que, poco a poco, fue ganado adeptos y concienciando de la importancia de rehabilitar el Cabanyal, sin destruirlo.

Ya en el año 2000, cuando este barrio valenciano se veía más amenazado que nunca por la demolición, se llevó a cabo una de las protestas más originales y reconocidas de la historia. Esta protesta, que recibía el nombre de 'Portes Obertes', consistía en ofrecer las casas de algunos vecinos para que jóvenes artistas expusieran sus obras.

Años luchando pacíficamente para evitar que el plan ilegal del PP se llevara a cabo. Por fin, tras la últimas elecciones, el actual gobierno municipal, liderado por Joan Ribó, paralizó este plan urbanístico, y se comprometió a regenerar un barrio que ya estaba muy degradado.

Lamentablemente, ha pasado un año de gobierno, y los vecinos del Cabanyal no han visto las mejoras prometidas. El problema de esta barrio no es solamente urbanístico, sino también social. En este sentido, se pide que se restituyan unas condiciones de vida dignas y se solucionen, con urgencia, la degradación que ha ido sufriendo este barrio marinero.

Hace algunos meses, el actual gobierno valenciano anunciaba que en septiembre se pondría en marcha el famoso Programa de Fomento de la Regeneración y Renovación Urbana del Plan Estatal de Vivienda, que comenzaría con la rehabilitación de alrededor de 300 viviendas. Y que además, se centraría en la mejora de la red de colectores, el reasfaltado de las calles o la ubicación de un Centro de Servicios Sociales.

Ya ha llegado el momento de ver si estas medidas se ponen en marcha y, por fin, se escuchan las demandas de unos vecinos que han luchado con uñas y dientes para defender lo que les pertenecía. Su barrio, sus casas, su historia y, en definitiva, su vida.

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