La Coordinadora de la Hostelería de los Barrios de València ha vuelto a protestar este martes contra las condiciones de la reapertura impuestas por la Generalitat, mediante una pegada masiva de carteles con el lema 'Así no hay quien abra' en los locales y paredes de varias calles, una movilización que ha arrancado en Juan Llorens.
Según sus cálculos, el 63,6% de los hosteleros de la ciudad no abrirá sus puertas hasta que puedan utilizar el interior de sus locales y alargar el horario de cierre, ya que desde el 1 de marzo solo se permiten terrazas hasta las 18 horas.
Tras un día de apertura, solo un 25% del total de los establecimientos de València ha podido levantar la persiana y con una caja de 160 euros de media que "no cubre ni el 25,2% de sus gastos diarios", como recoge una encuesta de la organización.
Con la protesta ha querido mostrar su "desesperación" y reivindicar que la mesa interdepartamental de este jueves 4 revise las medidas restrictivas actuales y iguale su situación a la del resto de actividades comerciales no esenciales, con reapertura de interiores con un 50% de aforo y cierre a las ocho de la tarde.
Los hosteleros han tachado de insostenible e insufrible la situación del sector, ante los datos "demoledores" del primer día de reapertura. Otra de su peticiones es la convocatoria inmediata de la mesa técnica y económica dentro del grupo de trabajo de la desescalada del ocio y la hostelería, a la que "se comprometieron" la Conselleria de Sanidad y la secretaría autonómica de Turismo la semana pasada.
A su juicio, en estos foros deben abordarse con carácter de urgencia los medios técnicos que permitan garantizar la seguridad de los espacios cerrados y la convocatoria de la segunda fase del plan de ayudas 'Resistir', algo "imprescindible" en este momentos.
La pegada de carteles se ha realizado simultáneamente en otros barrios y se sucederá a lo largo de los próximos días por València, avanza la coordinadora en su comunicado.