La Audiencia de València juzgará el próximo lunes al intendente de la Policía Local de Aldaia entre 2004 y 2019 por un delito continuado de abusos sexuales.
Según el escrito de acusación del fiscal, el jefe policial abusó de forma continuada de una agente en dependencias oficiales, prevaliéndose de su posición de superior jerárquico respecto a la víctima.
La Fiscalía solicita provisionalmente para él dos años y medio de prisión, otros dos de libertad vigilada y alejamiento de la perjudicada y prohibición de comunicación con ella durante tres años.
La Fiscalía relata que unas diez veces, entre 2011 y 2012, el acusado hizo tocamientos y besó a la agente en el retén de la Policía, en el ascensor y en la zona de comedor, mientras le decía: "Tranquila, que estás con el jefe".
Una de esas veces, incluso, llegó a mostrarle los genitales, según el Ministerio Público, que reseña en su escrito de acusación situaciones parecidas a partir de 2013, en la nueva central de Policía, y en 2018.
La víctima ha tenido que recibir tratamiento psicológico y la Fiscalía pide que el exintendente, y el Ayuntamiento de Aldaia de forma subsidiaria, la indemnicen con 3.500 euros por los daños morales.