La Semana Santa se acerca. La gran mayoría de los países europeos están registrando repuntes de casos que los sitúan en una cuarta ola. Atendiendo a este contexto, las autoridades sanitarias españolas se han mostrado preocupadas en los últimos días tras una incidencia acumulada media que aumenta ligeramente en casi todas las comunidades autónomas. Es por ello por lo que el Ministerio de Sanidad había contactado con las regiones para ahondar la posibilidad de ampliar las restricciones durante las vacaciones de Pascua.
Todo seguirá según lo acordado el pasado 10 marzo, como así lo ha decidido el Consejo Interterritorial en la tarde del miércoles. Asimismo, se ha decidido no aplicar ninguna nueva medida sobre los horarios del toque de queda ni de cierre de actividad no esencial, según han informado a Europa Press fuentes de la reunión. El documento que se acordó hace unas semanas establecía las 23.00 como la hora límite para el toque de queda en estas fechas. Pero en ningún caso se podría adelantar a antes de las diez de la noche sin cambiar el decreto, algo que no está sobre la mesa.
A lo largo de la jornada de este miércoles, distintas informaciones aseguraban que la ministra de Sanidad, Carolina Darias, se habría puesto en contacto con algunos consejeros de Salud de distintas Comunidades Autónomas para sondear la posibilidad de adelantar el toque de queda a las 20.00 horas en Semana Santa.
De hecho, en la reunión de este miércoles ha estado presente el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, que ha señalado a las autonomías la necesidad de controlar las medidas que se desprenden de este documento compartido de actuaciones en la Semana Santa.
Además, ha habido varias CCAA que han pedido un control exhaustivo de las fronteras tras las críticas al Gobierno por permitir el turismo extranjero pero no la movilidad entre distintas autonomías. Aquí, Marlaska ha defendido el control que ya existe en los aeropuertos.
La medida, en cualquier caso, está en manos de las comunidades autónomas. Cada una de las regiones decidirá si adelantar el toque de queda a las 22 horas, tal y como lo establece el estado de alarma. En cuanto al número de personas que se pueden reunir, se limita a un máximo de cuatro en espacios públicos cerrados y seis en espacios públicos abiertos, salvo que se trate de convivientes. En espacios privados, las reuniones se limitarán a convivientes.