Los juzgados valencianos han reanudado este jueves su actividad --con la activación de los plazos procesales, que habían quedado suspendidos como consecuencia del coronavirus-- con colas puntuales en los accesos de la Ciudad de la Justicia de València al tener que guardar la distancia de seguridad, la búsqueda de conformidades entre las diferentes partes de los procedimientos para evitar llegar a juicio, una amplia agenda de señalamientos y medidas sanitarias para evitar contagios.
Así lo han puesto de manifiesto agentes judiciales, fiscales y sindicales consultados por Europa Press, quienes han coincidido en advertir de un "colapso" en los juzgados ante el número de vistas aplazadas por la Covid-19, así como causas, y la "dificultad" para tramitarlas en la actualidad de manera ágil.
Según los datos facilitados a Europa Press por el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana, seis salas multiusos de la Ciudad de la Justicia de València han celebrado en esta jornada vistas, de las jurisdicciones de Primera Instancia, Contencioso-Administrativo, Familia y Penal, en poco número ya que la mayoría de juicios se han señalado a partir del próximo lunes. Y en el caso de las secciones penales, se señalan las vistas que prevean posibles conformidades o de causas con preso.
El edificio, que tiene un contador para medir el aforo de 2.130 personas que pueden entrar --entre público y profesionales, sin contar a los funcionarios-- no ha bajado durante la mañana de 2.000, lo que supone que como máximo 130 personas han accedido al interior.
En cuanto a las demandas, en el servicio común se han contabilizado 350, una cifra que suele ser habitual, aunque de ellas 157 corresponden al ámbito social, lo que supone un aumento aunque no significativo en el contexto actual por la crisis, según las mismas fuentes.
Asimismo, durante la jornada se han celebrado bodas en el Registro Civil, que ya empezó esta actividad el pasado viernes. Como consecuencia del confinamiento, se tuvo que suspender 200 celebraciones nupciales, pero ahora, en la desescalada, este órgano ha añadido un día más para poder llevarlas a cabo, de manera que se han fijado los miércoles, jueves y viernes.
Para junio, se han señalado inicialmente 120 bodas, si bien se está llamando a los contrayentes para ver si las quieren mantener en las condiciones que recoge la actual fase de desescalada.
BÚSQUEDA DE CONFORMIDADES
En este contexto, fuentes consultadas por Europa Press han explicado que se están buscando las conformidades o acuerdos entre las partes de los procesos para evitar llegar a juicio y no demorar las esperas a denunciados y denunciantes. De hecho, para la próxima semana ya se están señalando, al menos en la Ciudad de la Justicia de València, diferentes procedimientos que aspiran a conformidad.Las agendas de los señalamientos de los fiscales, por ejemplo, son "escandalosas", ha comentado una fiscal, quien ha advertido de que casos urgentes que necesitan de una respuesta eficaz, pero ha lamentado la falta de tiempo y de personal para poder atenderlos.
A este respecto, el juez decano de València, César Calvé, ya alertó hace unas semanas de que la reanudación progresiva de los procedimientos iba a suponer una "elevadísima" carga de trabajo, y citó como ejemplos los concursos de acreedores, medidas relativas a la custodia, visitas y pensiones en el ámbito del derecho de familia, reclamaciones económicas por impagos, despidos, ERTE, impugnación de sanciones o responsabilidad civil y patrimonial.
Así mismo, estas instalaciones judiciales de la ciudad de València han registrado colas puntuales en los accesos debido, en gran parte, a la distancia de seguridad que debían guardar los ciudadanos para evitar contagios. Sin embargo, la tónica habitual ha sido la de la "tranquilidad". También, muchos de las personas que se han acercado tenían la intención de preguntar, por lo que han sido derivadas a atención telefónica.
AUSENCIA DE PROTOCOLOS CLAROS
Por su parte, los sindicatos han advertido de que el principal "problema" al que se enfrentan los trabajadores en Justicia, con la vuelta a la nueva normalidad tras la Covid-19, es que no existen protocolos "claros" de trabajo.En este sentido, STAJ ha manifestado: "Hoy se reactivan los plazos procesales y esto conlleva una nueva dinámica de trabajo, pero todavía no tenemos instrucciones de cómo actuar. No sabemos cuándo ni que cantidad de citaciones podemos dar a los ciudadanos. Esta es nuestra principal preocupación. La justicia se está colapsando y el papel tiene que salir. Se acumulan los procedimientos", han apostillado desde el sindicato.
MEDIDAS SANITARIAS Y DE SEGURIDAD
La imagen de los juzgados también ha cambiado. Desde la Conselleria de Justicia se ha preparado un plan de contigencia diferenciado para cada una de las 63 sedes judiciales repartidas entre las tres provincias de la Comunitat con una inversión cercana a los tres millones de euros.Estos planes contemplan medidas como el control del aforo en las dependencias del edificio judicial, la instalación de más de 400 mamparas en los puntos de atención al público, la señalización de itinerarios internos, la reorganización de los accesos, acciones extraordinarias de limpieza y desinfección y, además, el suministro y reparto de elementos de protección individual como mascarillas y guantes para las plantillas.
En líneas generales, se ha limitado a un tercio el aforo máximo de cada edificio judicial y, además, se han instalado 1.800 postes separadores, 2.200 carteles, más de 600 dosificadores para el que se ha adquirido más de 8.500 litros de gel desinfectante.
Por provincias, en la de Valencia, en la Ciudad de la Justicia se ha establecido un aforo máximo de 3.927 personas que pueden estar a la vez en el complejo manteniendo una distancia de seguridad de dos metros. Esta instalación está diseñada para albergar más de 13.000 personas entre unos 2.000 trabajadores y un flujo máximo de 11.000 al día.
En el caso de la Ciudad de la Justicia de la capital de La Plana, se establece un aforo máximo de 1.193 personas cuando el edificio del Bulevar de Vicente Blasco Ibáñez tiene una capacidad de alrededor de 3.600 personas.
Por último, en el caso de los juzgados del partido judicial de Alicante, se ha establecido un aforo máximo entre las siete sedes de 1.702 personas cuando, en circunstancias normales, estas instalaciones albergarían poco menos de 5.100 personas.