La consellera de Justicia, Interior y Administración Pública, Gabriela Bravo, ha anunciado que se va a aumentar la dotación policial de la Oficina de Denuncias especializada en Violencia de Género en siete agentes más, que se sumarán a las nueve que ya ejercen en esta instalación de la Ciudad de la Justicia de València, donde también trabajan 23 profesionales (psicólogas y trabajadoras sociales) de la Red de Oficinas de Asistencia a las Víctimas del Delito.
Bravo ha hecho este anuncio tras la reunión que ha mantenido este viernes con la comisaria jefe de la Policía de la Generalitat, Marisol Conde, y la nueva coordinadora de la Oficina, la inspectora jefe María Pilar Bojó, quien será, además, la responsable de las otras dos oficinas que se abrirán en Castelló y Alicante y que se prevé que estén operativas dentro de un año.
Con el aumento de la dotación policial, según la consellera, "podremos dimensionar mejor el trabajo de la oficina" que ha dado unos resultados "muy satisfactorios" desde que se puso en marcha en abril de 2019. En este sentido, la consellera ha explicado también que se van a poner en marcha "protocolos de colaboración" con las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado para atender a las víctimas de violencia de género con la experiencia acumulada durante este tiempo en este servicio público que es único en España.
En estos veinte meses de funcionamiento, en la oficina se han atendido un total de 1.049 víctimas. Eso implica que, de media, han pasado dos mujeres cada día por este espacio seguro de la Ciudad de la Justicia de València.
En los ocho meses de 2019 en los que operó la Oficina, se atendió a 390 víctimas, de las cuales 252 terminaron formalizando una denuncia. Por su parte, en el año 2020, el número de víctimas atendidas casi se duplicó pues ascendió a 659, de las que un total de 293 formalizaron la correspondiente denuncia ante la autoridad judicial.
La nueva responsable de la Oficina será la inspectora jefe del Cuerpo de Policía Nacional, María Pilar Bojó. Es una especialista en violencia de género de acreditada experiencia y formación y que se encargará también de la puesta en marcha y coordinación de las futuras oficinas de Alicante y Castelló.
En la Comunitat Valenciana, las mujeres maltratadas tardan, de media, siete años en verbalizar su situación y, por ello, la principal misión de esta oficina es "que esta denuncia se produzca mucho antes y que las víctimas sepan que se han mejorado los mecanismos de respuesta institucional en el ámbito judicial para que puedan salir del infierno porque, en ningún caso, estarán solas", ha dicho la consellera.
En la oficina se ofrece a las víctimas un entorno "seguro y amable donde realizar la denuncia y que, además, se sientan acompañadas y protegidas durante todo el proceso y que, consecuentemente, se animen a denunciar", ha indicado Bravo.