Opinión

Viajar, vivir y conciliar

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Un nuevo debate se está abriendo paso en nuestra ciudad al calor de las excelentes cifras de turismo que acaba de registrar Valencia y que ha quedado patente durante estas Fallas, las primeras que celebramos como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad. La llegada de turistas ha rebasado su máximo histórico e indicadores como las pernoctaciones o el gasto medio son muy positivos, en parte, como consecuencia de la dramática situación que sufren países de la cuenca mediterránea. Pero, también, porque somos un destino emergente que se abre paso tras la entrada en barrena de modelos como el de Barcelona.

Esta coyuntura ha supuesto una oportunidad para que los turistas descubran una ciudad amable, acogedora, rica en patrimonio histórico, cultural, gastronómico y natural. Quienes nos visitan, se sorprenden de todo lo que Valencia les ofrece y que había quedado oculto tras un decorado de cartón piedra a medida de grandes fastos insostenibles e investigados.

A nadie le cabe duda de que el turismo una fuente clave de creación de empleo, generación de riqueza e impulso del bienestar pero el reto es  conciliar los intereses de nuestros vecinos y vecinas y las personas que nos visiten, generar riqueza, contribuir al mantenimiento de nuestro patrimonio natural y cultural o establecer estrategias que garanticen un crecimiento continuado y estable.

Coincidimos en que València debe ser un destino turístico reconocido internacionalmente y contar con un modelo turístico inteligente, sostenible y rentable, basado en el consenso, el diálogo y la generación de sinergias. Es una tarea que debe liderar un Gobierno responsable, y así lo asumimos, desde una gobernanza transparente, eficiente y, fundamentalmente, colaborativa.

Por ello, el Plan Estratégico de Turismo Valencia 2020 surge del análisis de las propuestas, inquietudes y requerimientos de todos los implicados en la actividad turística, desde la implicación activa de todos los agentes.  Así, durante meses hemos convocado y escuchado a expertos y profesionales, debatido junto al sector y analizado las demandas y requerimientos. Hemos abierto un proceso de consulta final para impulsar la participación y las aportaciones, a través de los representantes vecinales, los agentes sociales y los grupos políticos con representación municipal.

En el marco de estos pilares, el Plan 2020 materializa nuestro compromiso por desarrollar una estrategia para el turismo de la ciudad que nos permita afrontar con éxito los retos que la evolución del mercado pero, sobre todo, garantizar la convivencia. Valencia tiene que seguir siendo una ciudad amable y acogedora; una ciudad para ser vivida por sus vecinos y vecinas. Por ello, el Plan 2020 se basa en la calidad, no en la cantidad, en aumentar el gasto por turista y la rentabilidad. Se trata, en definitiva, de conjugar correctamente viajar, vivir y conciliar.

 

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