La última encuesta del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) consolida a Ciudadanos (Cs) como alternativa de Gobierno: hemos subido más de 6 puntos desde julio en estimación de voto y seguimos escalando hasta un triple empate con los viejos partidos en intención de voto directa. Además, somos la formación política nacional con el líder mejor valorado y con mayor fidelidad de voto. Por tanto, la que genera más confianza.
Por el contrario, observamos como la coalición A la Valenciana (Compromís, Podemos y EU) sólo retiene el 51% de sus votantes. Por cierto, parte de eso electores, un 7’8% apostarían ahora por Cs.Es el mejor resultado del CIS en la historia de Ciudadanos y por eso, estamos satisfechos; pero con los pies en el suelo. Por supuesto que nos enorgullece que los españoles, entre ellos los valencianos, valoren nuestro trabajo. Sin embargo, creemos que la verdadera encuesta es la de las urnas, y a ese día hemos de llegar con los deberes hechos.
En la provincia de Valencia nos estamos esforzando por pisar el terreno, por recorrer cada pueblo y ciudad para analizar sus necesidades y proponer mejoras. No nos perdemos en clichés de la política del pasado, nosotros no somos de izquierdas o de derechas, no somos rojos o azules. Eso se acabó, como muy bien denota la encuesta.
Entonces, ¿qué es Ciudadanos? Cs es un proyecto reformador y progresista, que pretende cambiar las cosas desde la honestidad y el sentido común sin radicalismos ni populismos, que quiere recuperar la clase media y trabajadora en todos los rincones del país con igualdad y solidaridad.
En Cs defendemos el diálogo para avanzar. Nuestra única línea roja es la corrupción ¡por ahí sí que no! Somos, como nuestro nombre indica, ciudadanos: sabemos lo que es pagar un autónomo, conocemos lo que es luchar para prosperar, nos preocupa perder lo que tanto nos costó conseguir.
Así, desde el centro y la moderación, después de mucho tiempo construyendo la alternativa naranja, nos sentimos preparados para gobernar Ayuntamientos, CCAA y en toda España. Aun así, somos prudentes, las encuestas son solo un aliciente más para seguir trabajando, para seguir enriqueciendo nuestro proyecto para todos los españoles.
Nuestra obligación no es otra que seguir fiscalizando y proponiendo en todas las instituciones donde tenemos representación para mejorar la vida de las personas. No les quepa duda, lo vamos a continuar haciendo, vamos a seguir demostrando que somos capaces de conseguirlo porque creemos en este país y porque los españoles nos lo merecemos después de demasiado tiempo de corrupción y mala gestión.
Si tras este arduo trabajo, los ciudadanos depositan el voto naranja en la urna, que es la verdadera encuesta, insistiremos en la misma línea con más capacidad de acción. Siempre, en ese momento como en el actual, con la cabeza centrada y con los pies en el suelo.