Empieza la semana decisiva. Por primera vez desde que llegó a Río, Héctor ha pisado hoy el Estadio Olímpico. El mismo en el que competirá dentro de dos días. La adrenalina se dispara, las emociones, las expectativas... todo está a flor de piel, sin embargo, el lanzador debe seguir concentrado, trabajando para conseguir su objetivo: el oro olímpico.
"Estamos trabajando en pista, calentamientos y lanzamientos. Hoy, por ayer, seguiremos con esto. Luego iremos a dar una vuelta y a ver el estadio. No puedo imaginar como se dispara la adrenalina con el estadio lleno", explicaba Héctor Cabrera quien hoy ha seguido practicando lanzamientos.
"Algo curioso es que ya ha empezado la fiebre de los pines. Mirar como llevo mi acreditación. Todo el mundo va pidiéndolos y dándolos", explica orgulloso Héctor.