Las últimas encuestas apuntaban a que, por primera vez, el Partido Socialista iba a dejar de ser la segunda fuerza más votada. Sin embargo, la realidad ha sido muy diferente.
Unidos Podemos se ha quedado muy lejos de alcanzar el tan ansiado ‘sorpasso’. Con 71 diputados, las expectativas de Pablo Iglesias se han desvanecido.
El PSOE ha conseguido mantenerse con 85 diputados, aunque los resultados tampoco han sido favorables, si tenemos en cuenta que han perdido 5 diputados respecto a las elecciones de 2015.
Pablo Iglesias ha comparecido para anunciar su descontento por los resultados obtenidos y ha remarcado su preocupación al observar que los partidos, a los que califica, de conservadores han aumentado su apoyo.
Aun así, Unidos Podemos ha expresado su predisposición a sentarse a hablar para conseguir llegar a un acuerdo.