El pasado jueves tuvo lugar la inauguración de la primera planta fotovoltaica de Morredondo, un proyecto ideado y costeado por los 325 socios y regantes que componen la sociedad civil de regantes de Sant Vicent Ferrer. Este proyecto se ha llevado a cabo con la finalidad de abastecer un total de 3.200 hanegadas que, una vez recuperada la inversión de 300.000 euros, reducirá el coste del litro de agua a la mitad que les permitirá un ahorro de 3,5 millones de euros en un plazo de unos veinticinco años.
Se han instalado 700 placas distribuidas en un total de 2.500 metros cuadrados. Este ambicioso proyecto ha podido llevarse a cabo gracias al esfuerzo de los socios de la sociedad y con la ayuda de la Caixa Rural de Torrent.
La tarde del jueves se inauguró esta planta fotovoltaica que contó con la presencia del alcalde Jesús Ros, acompañado por Andrés Campos, concejal del área de Modernización y Gestión de recursos, e Inma Amat, concejala de Medio Ambiente. El alcalde Jesús Ros reconoció a los presentes “el gran esfuerzo que han hecho todos los socios de la sociedad civil, con su presidente Ramón Merino a la cabeza, llevando a cabo un proyecto de estas magnitudes, que favorecerá a largo plazo el sector de la agricultura del municipio de Torrent”.
Además, también estuvo presente Franciso Rodríguez, secretario autonómico de Agricultura y Desarrollo Rural, junto al Director de la Caixa Rural, Ismael Casabán y Amparo Puig, Directora de la oficina principal de Caixa Rural de Torrent, así como la mayoría de los socios de la sociedad civil de regantes Sant Vicent Ferrer.
Este proyecto sitúa a la sociedad civil de regantes Sant Vicent Ferrer como pioneros en materia de preservación y conservación del Medio Ambiente en el sector del regadío con este sistema que generará energía de forma autónoma.