El Ayuntamiento de Ontinyent está intensificando la lucha contra el mosquito tigre ante su proliferación a las últimas semanas, debido a las altas temperaturas registradas después del episodio de DANA registrado en septiembre.
Así, dentro del Plan Municipal de acción contra esta especie, el Ayuntamiento ha incrementado las tareas de colocación de trampas en jardines públicos y aplicación de larvicidas en red de aguas. Con todo, como recuerda la regidora de Medio Ambiente, Sayo Gandia, “todo lo que hacemos en los espacios públicos no va a ser efectivo si no sumamos los esfuerzos de la ciudadanía para evitar la proliferación de este insecto, puesto que necesita muy poca cantidad de agua para criar y la colaboración ciudadana es imprescindible".
La regidora recordaba que la ciudadanía puede colaborar aplicando una serie de medidas, entre las cuales encontramos evitar el uso de recipientes que puedan acumular agua estancada; mantener los niveles de cloros adecuados en piscinas, balsas y estaños; proteger los pozos y aljibes con mallas mosquiteres; vigilar el riego por goteo; renovar cada 2 o 3 días el agua de los abrevaderos de los animales y echar agua en los sumideros, al menos una vez a la semana.
El “mosquito tigre”, especie exótica originaría del sudeste asiático, es potencial transmissora de varias dolencias infecciosas, entre ellas el dengue, el zika o la chikunguña.