Concejales de las seis poblaciones que tocan la sierra de Corbera y de les Agulles se reunieron ayer por la tarde en Alzira para impulsar la creación de un consorcio supramunicipal que permita la gestión y la protección en común de esta cordillera, declarada como Zona de Especial Protección (ZEC) por el Consejo valenciano. Dentro de este macizo se encuentran los parajes naturales la Murta i la Casella (Alzira), de les Fontanelles (Corbera), les Muntanyes de Llaurí (Llaurí) y el Pla del Barber (Benifairó de la Valldigna), en proceso de reconocimiento. Además encontramos dos monumentos declarados Bienes de Interés Cultural (BIC), como son lo Castell de Tascas o Alcalà de Alfandech (Tavernes de la Valldigna) y el Monasterio de Santa Maria del Arrayán (Alzira).
El Consorcio forestal de la sierra de Corbera y les Agulles «podría actuar como entidad autónoma y a la vez como ente de coordinación entre las administraciones por lo que respecta al área del de la ZEC sierra de Corbera, dirigiendo acciones para conseguir coordinar las administraciones que tienen competencias en los recursos forestales y culturales con las administraciones locales que tienen competencias urbanísticas y de control territorial; mantener la autonomía local en la intervención sobre el mismo territorio, a la vez que ofrecer su colaboración y establecer una coordinación con otros entes locales para la solución de problemas comunes o parecidos; y, por último, integrar asociaciones y fundaciones sin ánimo de lucro que compartan los mismos objetivos y puedan contribuir a la financiación de sus actividades», explican los técnicos de la Concejalía de Medio Ambiente, Agricultura y Transición ecológica del Ayuntamiento de Alzira.
A estas alturas, «la carencia tanto de presupuesto como de capacitación técnica adecuada a los ayuntamientos para poder realizar acciones de prevención de incendios y de gestión forestal sostenible, muchas veces imposibilita que este servicio forestal municipal se pueda llevar a cabo», aseguran. Esa es la principal queja que expresaron ayer a la reunión los regidores asistentes, puesto que al tratarse de municipios pequeños los recursos de cada ayuntamiento están muy limitados, cosa que se traduce en falta de comunicación entre las administraciones que tienen competencia a la Sierra de Corbera, para coordinar y ejecutar medidas efectivas de cara a la prevención de incendios forestales y la gestión forestal sostenible o la ordenación y la regulación de los usos y las actividades permitidas, duplicidades de responsabilidades que dificultan un sistema coherente y efectivo de gestión, insuficiencia de equipos técnicos dedicados a gestionar el espacio y ejecutar proyectos innovadores a las diferentes administraciones y carencia de espacios de canalización de la participación ciudadana unificados y permanentes.
La propuesta, promovida desde el Ayuntamiento de Alzira, cuenta con la aprobación inicial por parte de la Dirección General de Prevención de Incendios Forestales de la Conselleria de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica, que «la voz con buenos ojos», según asegura el regidor de Medio Ambiente, Agricultura y Transición ecológica, Pep Carreres. También la prestigiosa Fundación Pau Costa avala la iniciativa, un modelo de gestión que está cada vez más extendido. Según Carreres, la gestión mancomunada permitirá poner en marcha iniciativas más ambiciosas, como rutas para la entrada de manadas para mantener limpios los bosques o la explotación común de los recursos de la zona.
Los concejales asistentes ayer a la reunión, que tuvo lugar al MUMA de Alzira, se comprometieron a presentar a los plenarios de sus ayuntamientos el documento «Pacto por la sierra», el paso que formaliza el compromiso de cada municipio y que permitirá iniciar la creación de la figura jurídica del consorcio. La intención es también conseguir la implicación en este proyecto de las instituciones superiores, como por ejemplo las consellerías o la Diputación de València «porque colaboran económicamente», detalla Carreres.
El modelo de gestión entre los municipios limítrofes a la sierra de Corbera y de las Agujas está ya previsto a la revisión del Plan Local de Prevención de Incendios Forestales de Alzira, que está pendiente de aprobar por la Consellería de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica, y según defienden desde el consistorio alcireño, permitirá reducir el riesgo de incendio forestal y mejorar el mantenimiento de los bosques, conservar la biodiversidad de la sierra, promover un plan de ordenación forestal común a toda la sierra de Corbera, coordinar la información y la promoción de la actividad turística en los diferentes municipios implicados, inventariar y cartografiar todo el patrimonio natural, etnográfico y cultural de la sierra de Corbera y velar y trabajar por el buen estado de los senders y las áreas recreativas.