El Ayuntamiento de Paterna, a través del Área de Zonas Verdes de la empresa pública GESPA, ha llevado a cabo la tala de una palmera de aproximadamente 25 metros de altura debido al alto riesgo de caída que entrañaba.
La palmera, que estaba situada en el número 33 de la avenida Vicente Mortes, era de la especie phoenix dactyliphera, conocida comúnmente como palmera datilera. Tal y como ha explicado la concejal de Infraestructuras, Núria Campos, “presentaba un estrechamiento del estípite (nombre que recibe el tronco de un árbol que no tiene ramas laterales como las palmeras), lo que producía una debilidad estructural y la consecuente posibilidad de fractura”.
Además, la regidora ha puntualizado que al encontrarse en una avenida abierta estaba expuesta a fuertes vientos y que “en los últimos meses, había sufrido un desplazamiento de dos metros con respecto a su eje, y a mayores intensidades de viento se esperaban desplazamientos mayores que comprometían la estabilidad de la palmera, lo que suponía un riesgo para los edificios que la rodeaban, así como para los coches estacionados y los peatones que frecuentan la avenida”.
Debido a su gran tamaño, para llevar a cabo la tala fue necesario el alquiler de una grúa de gran tonelaje que garantizaba la seguridad de los operarios. A medida que se iba talando la palmera - que se cortó en cuatro trozos de más de seis metros cada uno-, cada resto iba sujeto por la grúa y depositado en un contenedor de obra. En total, se recogieron unos 5.000 kilos de residuos verdes.
Además, aprovechando el alquiler de la grúa de gran tonelaje, tras la tala de la palmera se procedió a cortar un vástago de pino en la Canyada que tras los últimos temporales presentaba problemas de sustentación con un serio riesgo de caída.