Marcas en el suelo para subir y bajar por escaleras distintas, separación entre los concejales en el salón de actos, ausencia de público, mascarillas y un amplio orden del día son algunos de los elementos que convierten este pleno, el primero que se celebra en Puçol desde que se declaró el estado de alarma, en uno de los más extraordinarios de la historia de la democracia. El vídeo con la grabación íntegra, que se publica en las redes sociales És Puçol el miércoles 27, servirá para que los vecinos puedan disfrutar del acontecimiento.
Era un pleno extraordinario por el día en que se convocaba (martes, en vez de lunes), por el horario (18 horas, pronto, se preveía que iba a ser largo), por la distribución de los concejales ocupando el espacio reservado habitualmente al público (para cumplir las medidas de seguridad) y porque desde febrero Puçol no había celebrado su habitual pleno mensual.
La alcaldesa Paz Carceller comenzó agradeciendo el esfuerzo de todos, a nivel nacional y a nivel local: trabajadores de todo tipo que han estado dedicando su tiempo y, en ocasiones, mucho más de lo que exige su trabajo, a ayudarnos a salir de la crisis del coronavirus.
Luego se guardaron dos minutos de silencio: el primero, por las víctimas del Covid-19; el segundo, habitual en todos los plenos, por las víctimas de la violencia de género.
Y a partir de ahí un larguísimo orden del día.
Fueron dos horas de debate, aprobación de los puntos y, en general, una sesión intensa, pero sin tensión añadida… probablemente todos eran conscientes de que estaban haciendo historia.